Paula Montenegro: “Cuando hablamos de discriminación en los barrios hay que tener en cuenta tres factores: la clase, el género y la etnia”

Paula Montenegro asumió esta semana como coordinadora de la Subdelegación Zona Sur del conurbano bonaerense del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI). En diálogo con AUNO, habló de su nuevo rol y desafíos de su flamante función, y se expresó a favor de construir una sociedad “más igualitaria y solidaria”.

¿Cómo te sentís en esta nueva función al frente del Inadi zona sur?

Representa un gran desafío y una alegría enorme de poder acompañar y ser parte de la gestión de Victoria Donda, en el organismo. Me parece que lo que viene a plantear es la necesidad y la convicción de que el Inadi cumpla un rol en la construcción de una sociedad que sea más igualitaria, solidaria y empática. Cuando ella asume la dirección del organismo plantea esta necesidad de sacar el Inadi a la calle, que implica que no sea sólo un espacio de recepción de denuncias, que es una labor muy importante, sino que también colabore en la construcción de otro tipo de sociedad. Esto implica la coordinación de proyectos, la articulación con los diferentes organismos de la sociedad política y civil, y con las organizaciones sociales, para poder prevenir y erradicar cualquier forma de discriminación en la sociedad.

¿Cuáles son las problemáticas relacionadas con la discriminación que sufren quienes habitan en los barrios del conurbano y cómo las abordarías?

Cuando hablamos de discriminación en los barrios del conurbano hay que tener en cuenta tres factores que tienen que ver con la clase, el género y la etnia. Cuando pensamos en los hechos de discriminación y en los hechos de violencia asociados a actos discriminatorios, mayormente encontramos algunos de estos factores. Hay un ejemplo que parece ‘sonso’, pero que es claro. Tiene que ver con la cantidad de memes que circulan respecto de la
representación del conurbano bonaerense. Por lo general están asociados a pibes y pibas que tienen determinadas características, en situación de pobreza, asociados a determinada identidad juvenil del barrio y al delito. Allí tenés un claro acto de discriminación, que tiene que ver con reforzar una representación de lo que se cree que es nuestro conurbano bonaerense.

¿Cómo se transforma esa situación?

Para poder erradicarla o transformar esa representación implica, en primer lugar, visibilizarla. Poder poner en juego cómo se construyen esas categorías y desde qué lugar pensamos esos lugares. Es un ejercicio que tenemos que hacer y que implica que también esté asociado a políticas que busquen generar conciencia, reflexión sobre determinado hechos de cosas. Por eso es necesario el trabajo y la capacitación, por ejemplo en las escuelas, con funcionarias y funcionarios del estado, la articulación con organismos estatales con los municipios, con organizaciones de la sociedad civil para erradicar las situaciones de violencia y discriminación, que se generan a raíz de determinadas representaciones construidas históricamente.

¿Los medios hegemónicos influyen?

Sí, me parece que hay una representación de los habitantes del conurbano que por lo general está asociada a determinadas zonas y que otras son excluidas. Esto es reforzado por los medios y está bueno poder ponerlo en discusión. ¿Por qué necesitamos encuadrar a toda la sociedad dentro de un sujeto universal al cual todos deberíamos aspirar a ser? Esa es una idea que necesita ser transformada, porque si partimos desde esa base claramente todo lo que se encuentre por fuera va a ser distinto, lo no normal, lo marginal. Esto igualmente es una mirada parcial de lo que a mí me parecen las problemáticas relacionadas a actos discriminatorios que se pueden encontrar en nuestra región y es uno de los objetivos que tenemos desde el Inadi Zona Sur. Trabajar en la construcción de un diagnóstico que dé cuenta en dónde se encuentran radicados los actos discriminatorios

¿Cuáles son las iniciativas que realizarán para contribuir a la igualdad de género?

Desde el Inadi, se vienen trabajando diversas campañas de concientización y la promoción de derechos y la erradicación de actitudes discriminatorias y violentas con respecto a las desigualdades de género. En eso me parece importante seguir articulando redes junto a las diferentes organizaciones feministas del colectivo LGBTQ+. Con los diferentes organismos estatales y gubernamentales que trabajan esos temas. Para que el Inadi pueda llevar adelante un trabajo articulado con las diferentes organizaciones y organismos del estado en pos de contribuir a la construcción de una sociedad sin desigualdades de género.

¿Qué opinas de la violencia simbólica contra la mujer y la xenofobia en el discurso mediático?

Me parece que hemos dado un avance muy grande en los últimos años fundamentalmente gracias a la lucha del colectivo feminista. Desde el Ni una Menos hay cosas que ya no son admisibles en el discurso mediático y que son altamente repudiables. Si aparecen, no tardan en ser repudiadas por la sociedad y por los propios medios de comunicación. Hace siete años atrás era cotidiano ver al conductor de un programa importantísimo de televisión cortándole las polleras a las participantes de su programa y hoy ese mismo conductor da un discurso conmovido con las situaciones de violencia de género, incluso arrepintiéndose de su propio recorrido.

Hoy puede pasar gracias a la lucha del colectivo y particularmente de un Estado presente, que se hace cargo de esa agenda feminista. Como por ejemplo, la creación del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad. En el Inadi tenemos un observatorio de medios que monitorea estas cuestiones que aparecen en el discurso mediático, tanto para la violencia simbólica contra las mujeres como también los discursos xenófobos. Con respecto al plano de la xenofobia, no son tanto los avances respecto al feminismo, para ello es necesario que desde el Estado y el Inadi se pueda actuar rápido cuando aparezcan esos casos de violencia simbólica.

AUNO-14-06-2020
RD– HRC-SAM