Mientras la Canasta Básica Alimentaria (CBA) aumentó 3,9 por ciento y la Canasta Básica Total (CBT) registró una suba del 4,4, en los barrios del Conurbano bonaerense los precios de los alimentos se incrementaron un 6 por ciento en el mismo mes, de acuerdo con el relevamiento del Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (ISEPCI).
Junto con el Índice de Precios al Consumidor (IPC), que arrojó una inflación del 4,2 por ciento para el octavo mes del año, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dio a conocer esta semana la valorización mensual de la CBA y CBT del Gran Buenos Aires.
El Índice Barrial de Precios (IBP), al igual que el INDEC, releva todos los meses 57 productos de la canasta básica de alimentos, pero con la diferencia de que se realiza “en los negocios de cercanía de los barrios populares”, explicó a AUNO el director de ISEPCI, Isaac Rudnik.
“Siempre relevamos en cada negocio de cercanía, de cada producto, el precio más barato, sin importar si es primera, segunda o tercera marca”, precisó el coordinador del IBP y agregó que esto parte de entender que “las familias que están en los barrios populares -mucho más en la situación actual- no están buscando calidad ni marca, sino que están buscando conseguir esos productos indispensables al precio más barato”.
Así, los productos de almacén fueron los que registraron un mayor incremento en agosto, del 8,07 por ciento, seguido de frutas y verduras con un alza de 6,55 por ciento, lo que dejó en tercer lugar a las carnes, que subieron 2,04 por ciento
De esta forma, una familia de dos adultos/as y dos hijos/ pequeños/as precisa 412.081,13 pesos para acceder a los alimentos básicos, mientras que si a ello se le suma un conjunto de bienes y servicios (Canasta Básica Total), la misma familia necesita 914.820,11 pesos para no estar bajo el umbral de la pobreza.
Respecto a la diferencia entre ambos relevamientos, Rudnik señaló que el Instituto Nacional abarca “un universo más amplio de negocios”, pero consideró que “hay cuestiones metodológicas que probablemente tengan que actualizarse, tanto en los productos” que analiza el INDEC, como “en las proporciones que se consideran”.
Además de un aumento del 0,2 por ciento respecto a julio, el aumento generalizados de los precios de bienes y servicios también registró una variación interanual de 236,7 por ciento respecto a agosto de 2023 y un acumulado en los primeros ocho meses del año de 94,8 por ciento.
Rudnik indicó que la mirada del Gobierno de Javier Milei “es intentar” bajar la inflación “sobre la base de profundizar la baja de las ventas y la baja de la actividad económica”, lo que argumentó “tiene un límite, porque los precios de los servicios siguen aumentando empujadas por el retiro de los subsidios, que promueve el aumento de las tarifas, del transporte y del combustible”.
“Todos servicios obviamente impactan en general en el resto de los precios. No se pueden mantener el resto de los precios aislados del impacto que van produciendo estos incrementos de los precios regulados que dependen directa y exclusivamente de las decisiones del Gobierno”, remarcó.
De acuerdo con el INDEC, el rubro Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles tuvo el mayor aumento, en torno al 7 por ciento, debido a la suba del precio de los alquileres y de las tarifas de agua, electricidad y otros combustibles.
Le siguieron Educación, con un alza del 6,6 por ciento; Transporte, con un incremento del 5,1 por ciento; servicios de Comunicación, con un 4,9 por ciento; Restaurantes y hoteles, con un 4,8 por ciento; equipamiento del Hogar con un 4,3 por cient; y Salud, con el 4,1 por ciento, entre otros.
“Otra situación que hace difícil bajar el aumento de la inflación -comentó Rudnik a este medio- es el anclaje del tipo de cambio”, es decir, el dólar oficial, “con un incremento del precio de la divisa manual del 2 por ciento”, denominado crawling peg (devaluación administrada), que en el marco de una inflación del 4 por ciento “se comió” los 125 puntos de inflación de diciembre al inicio de la gestión de la Libertad Avanza (LLA).
“Hasta ahora, en realidad, está sostenido sobre la base de una intervención del (dólar) oficial en el Mercado Único Libre de Cambios, que obviamente se está comiendo las reservas (del Banco Central de la República Argentina)”, concluyó el director de ISEPCI.
AUNO-15-9-24
FM-SAM