Los trabajadores del Policlínico Lomas que fueron despedidos sin previo aviso hace tres semanas, no serán reincorporados porque la Justicia aceptó una presentación de “no innovar” que hicieron los directivos de esa institución, que pasa por alto la conciliación obligatoria que había dictado el Ministerio de Trabajo provincial y deja sin efecto la apelación de los empleados para ser reincorporados.
El abogado Luis López y la sindica de la institución, Viviana Feldman, que son los representantes legales del Policlínico, fueron los encargados de comunicárselo a los 12 empleados que se reunieron con ellos en la sede del ministerio, en Vieyte 280, Banfield, ayer por la mañana.
En ese encuentro también se los notificó de que ese mismo día cobrarían “el 30 por ciento de junio”, lo cual despertó la bronca de los trabajadores porque “no es lo que acordaron en encuentros anteriores”, aseguro Mirian Homens, una de las despedidas.
Los 600 pesos que recibieron son “una parte del total de junio” mientras que cuando reclamaron por el sueldo de mayo —que aún no cobraron— el abogado les habría contestado “que no estaba enterado de esa deuda” por lo que los perjudicados decidieron manifestarse en la puerta del centro asistencial en la avenida Hipólito Yrigoyen al 8476 de Lomas de Zamora.
Intentaron ser recibidos por el interventor del Policlínico, Carlos Colombo, y “pedirle explicaciones, pero no dio la cara”, se quejó Homens.
Según los trabajadores, López les habría asegurado “que el porcentaje que recibieron ayer” fue la primera de tres cuotas ya que el “23 del corriente obtendrían otro 30 por ciento; mientras que el día 6 de agosto terminarían de cobrar el 40 restante” para completar la deuda que la institución mantiene con su personal.
Pero eso “es mentira ya que nos deben el total de los sueldos desde mayo con los aumentos que corresponde al convenio de sanidad”, testificó Vilma Bagnalasta, otra de las afectadas. “Queremos cobrar toda la plata que nos deben desde el mes de mayo y con los aumentos correspondientes”, reclamó Bagnalasta.
La atención del Policlínico Lomas gozó de cierto prestigio, hasta que comenzó su debacle. Su dueño, Emilio Charlón, intentó “venderlo y hacer su negocio sin que le importe el futuro de los empleados”, aseveró Bagnalasta a AUNO.
Los ahora ex empleados hablan también de “irregularidades” en el servicio: “Los medicamentos que se utilizan son muestras que los médicos les proporcionan gratuitamente a los enfermos” porque “no hay insumos”, los internos “pasan frío porque en las habitaciones no hay gas” y sólo “se colocan estufas eléctricas que hacen saltar las térmicas y deben aguantar la falta de luz por varias horas”, dijo Bagnalasta.
Por otro lado, Homens añadió que el personal que aún conserva su puesto “es obligada a trabajar más horas de las que corresponden y no les pagan horas extras”, a la vez que parte del sueldo “lo cobran en negro” porque la “quiebra todo lo justifica”.
GL-AFD
AUNO-17-7-09
aauno@yahoo.com.ar