(AUNO-Tercer Sector*)Se estima que las tierras en manos de capitales extranjeros alcanzan a unas 18 millones de hectáreas, es decir, alrededor del 7 por ciento del territorio nacional. La venta indiscriminada de tierras y recursos naturales amparada en leyes aprobadas durante la década del 90, se expande a lo largo del país convirtiendo a los esteros del Iberá, en la provincia de Corrientes, en paradigma de un modelo económico sostenido durante esos años. Con el propósito de revertir la extranjerización de tierras, un proyecto de ley apunta a expropiar unas 310 hectáreas de los Esteros del Iberá. La iniciativa cuenta con un fuerte apoyo de representantes de organizaciones sociales como Hebe de Bonafini, Nora Cortiñas, Luís Farinello, Fernando “Pino” Solanas, Antonio Tarragó Ros, Jesús Olmedo, Teresa Parodi, Víctor Heredia, Liliana Herrero y León Gieco, entre otros.
El proyecto de la diputada correntina Araceli Méndez de Ferreira delimita los alcances de la ley declarando de “utilidad pública y sujetos a expropiación los inmuebles ubicados en los Esteros del Iberá, y zonas de influencia, adyacentes o limítrofes ubicados en los municipios de Concepción, San Miguel, Mercedes, Ituzaingó, Loreto, Santo Tomé y Carlos Pellegrini”. Si se convierte en ley, los campos adquiridos por el millonario estadounidense Douglas Tompkins y la empresa chilena Forestal Andina pasarán a Parques Nacionales y se creará en los esteros de Iberá, que ocupan unos 1,3 millones de hectáreas, el Parque Nacional y Reserva Nacional Esteros de Iberá.
Todo comenzó cuando el empresario emprendió a través de su fundación The Conservation Land Trust, la compra de cientos de miles de hectáreas en los Esteros de Iberá, a la familia Blaquier y a Pecom Forestal amparándose en la laxitud de la ley de inversiones extranjeras y la ausencia de una norma que regule la apropiación de tierras por capitales extranjeros. Desde entonces, el magnate estadounidense ha intentado desalojar a los pobladores históricos de la zona de Yahaveré, unas 16 familias que quedaron aisladas por el cierre de los pasos, como la ruta provincial número 6 a pesar de que una orden judicial exigía liberar el acceso para que los 140 ocupantes originarios de esas tierras puedan ejercer el derecho de paso.
El proyecto pone el acento en la relevancia estratégica de la zona. “Los Esteros constituyen un área estratégica por donde tiene su cauce el Acuífero Guaraní, el tercer reservorio de agua dulce más importantes del mundo, situada a menos de 700 kilómetros de la pista aérea de lo que será la futura base norteamericana Mariscal Estigarribia en la República del Paraguay”, señala la iniciativa.
Los Esteros de Iberá, que se caracterizan por ser terrenos pantanosos, intransitables, que suelen llenarse de agua por la lluvia, la filtración de ríos y lagunas posee plantas acuáticas, están integrados por 26 lagunas de agua dulce conectadas con el Acuífero Guaraní, una de las mayores reservas de agua dulce del mundo. Se calcula que el agua potable en el acuífero alcanza para abastecer a 700 millones de personas a razón de 300 litros por día.
El texto de Méndez de Ferreyra advierte sobre la usurpación de los recursos naturales del país. “La apropiación de recursos naturales de carácter estratégico, como el agua, puede provocar consecuencias fatales a mediano plazo para la población argentina en su conjunto, con la consiguiente afectación de los derechos humanos fundamentales de sus habitantes”, señala en sus fundamentos.
El proyecto también garantiza los derechos a la tierra de los antiguos pobladores, que serán censados por la Subsecretaría de Tierra. “La autoridad de aplicación de la presente ley deberá garantizar los derechos de los pobladores ancestrales de las tierras mencionadas y arbitrar las medidas correspondientes a esos efectos”.
A pesar del apoyo que obtuvo la iniciativa en distintos ámbitos, la Fundación Iberá Patrimonio de los Correntinos cuestiona la propuesta que declara que ese sitio, que representa el 15 por ciento del territorio de la provincia, pase a Parque Nacionales. Desde la Fundación se impulsa un proyecto que cuenta con la adhesión de productores y las familias que habitan allí, para declarar a los Esteros de Iberá “Patrimonio estratégico de los correntinos”. Si la Legislatura provincial lo sanciona quedaría ratificada la jurisdicción y potestad de Corrientes sobre los recursos naturales, señala la propuesta.
La situación en Corrientes es similar en otros puntos del país, como la Mesopotamia, la Cordillera y la Patagonia. Se calcula que hay unas 16.9 millones de hectáreas en venta y ofrecidos. Y unas 14.5 millones de hectáreas hipotecadas que podrían pasar a manos extranjeras si el Banco Nación o el Provincia (Buenos Aires) son privatizados. Y en la actualidad, 18 millones de hectáreas de tierras ya están extranjerizadas. En total, 50 millones de hectáreas de las 279 que conforman el territorio nacional podrían estar en manos extranjeras, que buscan agua dulce, petróleo, minerales, zonas cultivables y metales preciosos, entre otros recursos naturales. Es el caso de la minera canadiense Meridian Gold en Esquel, una ciudad chubutense ubicada a más de dos mil trescientos kilómetros de la Capital Federal, trata de extraer oro y plata de una mina a cielo abierto. Sin embargo, a través de un plebiscito, el 81 de la población le dijo “No a la mina”.
Aunque la propuesta de la diputada kirchnerista, en coautoría con 14 legisladores, cuenta con la adhesión de 30 diputados del Frente para la Victoria, el ARI, el Socialismo y el Peronismo Federal, como el presidente de la Cámara baja, Alberto Ballestrini, todo parece indicar que no será tratada como pasa con otro diez proyectos que exigen la reglamentación y la restricción para la compra de tierras por parte de extranjeros que no prosperaron. En este sentido, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, sostuvo que el Gobierno “no ha propiciado jamás” la expropiación.
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*Agencia Universitaria de Noticias y Opinión
Revista Tercer Sector