El experimentado delantero de Brown de Adrogué Fernando Zagharian se mostró hoy “muy contento y a gusto” por haber retornado al club del Sur del Gran Buenos Aires y admitió que el principal objetivo del ‘Tricolor’ pasa por “sumar la mayor cantidad de puntos para evitar el descenso”.
En declaraciones a la Agencia Universitaria de Noticias y Opinión, Zagharian sostuvo que su vuelta se debió “a la buena gente que trabaja en la institución” y, además, se animó a soñar con una posible clasificación para el octogonal de la Primera B Metropolitana, en donde se dirimirá la posibilidad de llegar a la B Nacional.
“Acá hay buena gente y, por sobre todas las cosas, cumplidora. Acepté venir por eso y porque me siento muy contento y a gusto jugando en este club”, sostuvo el goleador, de 29 años, que arregló contrato con la institución hasta junio de 2007.
El ‘Abuelo’ ya había vestido la casaca de Brown en la temporada 2002-2003 en la que dejó un buen recuerdo pese a la floja campaña que entonces protagonizó la entidad de Adrogué.
Por otro lado, destacó que integra “un gran plantel”, capaz de luchar por los puestos de vanguardia, aunque reconoció que el principal objetivo es “sumar puntos con la premisa de evitar el descenso”.
“Hay un plantel numeroso con muchos jugadores de experiencia. Pero la realidad es que estamos comprometidos con el descenso. Y el principal objetivo es sumar pensando en ello para después estar tranquilos”, expresó.
Con el triunfo sobre Estudiantes de Buenos Aires (2-1), en Caseros, Brown suma 16 unidades y ocupa el quinto escalón en la tabla de posiciones del Torneo Apertura 2006, a cinco unidades del líder, Deportivo Morón.
Además, el equipo conducido por Daniel Raimundo se aleja de sus principales rivales en la pelea por evitar el descenso a la Primera C (San Telmo y Defensores de Cambaceres) y también saca provecho de la pobre cosecha de El Porvenir.
Zagharian reiteró que la preocupación por salvar la categoría no les impide pensar en entreverarse con el grupo que lucha por el título.
En ese sentido, subrayó que “Brown hará lo posible por entrar al octogonal”, ya que si alcanzan ese objetivo cumplirán con la premisa básica que es “engrosar el promedio”.
Formado en las divisiones menores de Argentinos Juniors y confeso hincha del club de La Paternal, calificó de “remotas” sus chances de vestir nuevamente la camiseta del ‘Bicho’ y sostuvo que “jugando en el ascenso, es muy difícil volver a tener crédito en Primera División”.
“Viví momentos muy lindos allá. Uno se encariña mucho. Pero lamentablemente no me fui de la mejor manera porque me enteré que quedaba libre cuando todavía me quedaba un año de contrato. Hubiese preferido que me vinieran a hablar de frente y que me dijeran cómo eran las cosas”, reseñó el atacante, que se desempeñó en la Primera de Argentinos durante cuatro temporadas (1998-2002).
Después de su paso por el ‘Bicho’, el ‘Abuelo’ tuvo su primera experiencia en el exterior, ya que recaló en el Pyunik Yerevan de Armenia, en donde reconoció que no le fue “nada bien”.
“Cuando quedé libre de Argentinos me llegó el ofrecimiento de un club de allá. Pero cuando llegué, sinceramente, no me gustó nada. No le pasé bien. No me adapté a la cultura, a las comidas ni al idioma. Así que estuve cuatro meses y me volví”, recordó.
Previamente, el delantero, de raíces armenias, había tenido un ofrecimiento para jugar en la selección del país asiático.
Sin embargo, rechazó la citación porque integraba en el preseleccionado Sub-20, dirigido por José Pekerman, que se preparaba para disputar el Mundial de Nigeria 1999.
“Rechacé la propuesta de Armenia porque estaba en el Sub-20 de Argentina. Finalmente, el técnico se inclinó por los pibes que ya estaban jugando en Primera”, indicó.
Su otra escala internacional fue en 2004, después de su primer paso por Brown, cuando fue contratado por el Emelec, de la máxima categoría del fútbol de Ecuador.
Zagharian explicó que “allí fue todo muy raro” y comentó que “nunca terminó de aclimatarse”, dado que sufrió muchos problemas con el tema de la altura.
“Jugaba cada quince días. El técnico me ponía de local porque jugábamos en el llano. De visitante generalmente era en la altura y no podía aguantar ni cinco minutos que me ahogaba”, comentó.
Tras convertir sólo dos goles en su estadía en Ecuador, regresó a la Argentina para desembarcar otra vez en el fútbol de ascenso, ya que se sumó a las filas de Deportivo Morón.
“Las cosas no me salieron bien. Me lesioné, estuve medio año sin jugar y luego no fui tenido en cuenta por el cuerpo técnico (encabezado por Salvador Daniele). Lo bueno es que se me volvieron a abrir las puertas de Brown”, finalizó.
AUNO 28-09-06 MCI-MFV