Lomas de Zamora, mayo 9 (AUNO).- Más de 100 pinturas, fotos, bocetos, grabados y litografías invitan a recorrer la vida y obra del pintor Pío Collivadino en el museo que lleva su nombre en la localidad de Banfield y que volvió a abrir sus puertas, luego de una remodelación edilicia y de la restauración del material artístico.
Con un aire renovado y moderno, las obras de Collivadino se exhiben como un viaje en el tiempo, con información biográfica del artista, pantallas con imágenes y compases de tangos que acompañan a los visitantes durante todo el recorrido. La música y los paisajes de los óleos de Collivadino logran transportar a esas viejas épocas.
Para generar interés en los más jóvenes por este tipo de actividades culturales, desde el museo planean diagramar visitas escolares donde los alumnos puedan realizar juegos que los hagan interactuar con las obras exhibidas, como por ejemplo, rompecabezas de pinturas de Pío.
El museo funciona en una casa donada en Banfield en la década del 80 por Irma Arbeleche, esposa de Emilio Collivadino, sobrino de Pío. La propiedad fue remodelada y reacondicionada para albergar y preservar las obras con la temperatura y luces adecuadas.
El proceso de reacondicionamiento inició hace nueve años mediante un convenio firmado entre la UNLZ y la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM) que consistió en un trabajo en dos etapas.
Desde la UNSAM se hicieron cargo de la restauración de todo el material artístico e histórico del museo y Lomas de la remodelación edilicia.
En diálogo con AUNO, el secretario de Extensión de la UNLZ, Pablo Vellani, afirmó que para Banfield el museo es “una referencia muy importante” porque “en su momento fue el único museo de arte de la zona sur del Gran Buenos Aires”.
Vellani destacó que la UNSAM “tenía un taller de aparatología de última generación para la restauración de obras en muy mal estado por el paso del tiempo, y era necesario actuar en consecuencia”.
Además remarcó que para la UNLZ “la cultura es prioridad” y el museo es un ejemplo de eso. “Se lo puso en valor, se instalaron sistemas de seguridad, equipación, y comodidades para el visitante”, agregó.
El museo tiene la particularidad de mostrar el desarrollo total de la obra del gran artista: las fotos que inspiraron a Collivadino, los bocetos y sus cuadros, que generalmente ilustraban los paisajes cotidianos del Riachuelo, el puerto porteño, los barrios marginales y los edificios del centro de la ciudad de Buenos Aires.
Pío Collivadino (1869-1945) se formó artísticamente en Italia durante su juventud.
En Argentina tuvo a su cargo la dirección escenográfica del Teatro Colón y fue director de la Academia Nacional de Bellas Artes, donde enseñó hasta su jubilación en 1935. Y aunque no muchos los sepan, fue él quien descubrió a un joven Benito Quinquela Martín y lo hizo incursionar en la pintura.
El museo, ubicado en Medrano 165, se encuentra abierto al público, con entrada libre y gratuita, los viernes de 10 a 17 y los sábados de 12 a 19. Allí, se desarrollarán también muestras itinerantes, talleres, encuentros literarios y variadas actividades culturales.
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