Lanús, abril 9 (AUNO).- “Estamos todos muy contentos. La verdad que, más allá del sufrimiento, tiene un sabor especial haber clasificado de esta manera. Merecíamos pasar de ronda y por suerte se nos dio. Ahora empieza otra historia y habrá que tratar de hacer lo mejor posible para llegar lejos”, aseguró el arquero de Lanús, Agustín Marchesín, figura del empate 0 a 0 en Chile frente a O’Higgins que le permitió a su equipo arribar a los octavos de final de la Copa Libertadores.
Marchesín se mostró satisfecho por el pasaje a la siguiente fase y destacó que “fue un partido soñado”, en referencia a su actuación a lo largo de los 90 minutos, que incluyó, además de varias atajadas importantes, un penal desviado cerca del final que si era convertido por Pablo Calandria, delantero del club trasandino, hubiese significado la eliminación del ‘Granate’.
“Por la magnitud del duelo y por haber clasificado de forma agónica como se hizo, creo que fue la mejor presentación de mi carrera. Sin embargo, estoy feliz por el grupo. Este es un plantel que tiene mucha hambre de gloria y trabaja para conseguir estos objetivos”, sentenció el oriundo de San Cayetano.
Y agregó, ya al posar su mirada en torno al disparo desde los doce pasos que decantó en el momento más trascendental del compromiso: “Tuvo que ver mucho la intuición. Lo habíamos estudiado durante la semana y gracias a Dios pude atajar pese a la impotencia que nos generó porque no había sido mano la jugada previa”.
La explicación del guardavalla se centra en la infracción que cobró el árbitro brasileño Wilton Sampaio de Leandro Somoza, cuando en realidad la pelota le rebotó en la cara.
“En ese instante nos dio mucha bronca, pero había que mantener la calma porque si el penal terminaba en gol nos quedaban cinco minutos como para igualar el marcador”, señaló.
A la hora de un análisis del cotejo, Marchesín resaltó la diferencia que existió entre el primer tiempo y el segundo, cuando su equipo pudo llevar adelante el plan de juego preestablecido.
“En el arranque, el rival nos llevó hasta nuestro arco y nos complicó. Fueron inteligentes y no pudimos hacer pie. No encontrábamos el ritmo. Después nos paramos mejor, acomodamos un poco las piezas y ya no tuvimos tanta presión del adversario como al principio”, sintetizó.
Con respecto a la expectativa por las llaves de ida y vuelta (el rival recién se conocerá este jueves a última hora), el arquero deslizó la intención de tener un cruce con un equipo argentino.
“Nos da la oportunidad de no desgastarnos tanto en viajes. Es cierto que esos duelos conllevan una adrenalina especial, y un cansancio psicológico mayor, pero el beneficio de no viajar tanto se puede aprovechar”, comentó.
En paralelo con el certamen internacional, el conjunto que conduce Guillermo Barros Schelotto transita el Torneo Final, campeonato en el cual marcha en el quinto puesto, con 19 puntos, a dos unidades de los líderes Estudiantes de La Plata, Colón y San Lorenzo.
El ‘Ciclón’, justamente, es el próximo escollo, con el que se cruzará el sábado, desde las 21.15, en el Nuevo Gasómetro.
“No va a ser sencillo, pero ellos también están compitiendo en la Copa –esta noche recibe a Botafogo de Brasil para definir su futuro en el certman-. No nos queremos decidir de antemano por un torneo u otro. Tenemos la intención de pelear en ambos frentes”, remarcó Marchesín
AUNO-09-04-14
MRQ-MFV
