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Después de dos años en los que predominó la modalidad virtual en la enseñanza, las universidades nacionales están autorizadas para iniciar un nuevo ciclo con presencialidad plena a partir de esta semana. En la UBA y algunas instituciones del conurbano se establecerá un sistema mixto. En las casas de estudio de la zona se plasman algunas diferencias: la Universidad Nacional Guillermo Brown (UNAB) y la de Lanús (UNLA) mantendrán modalidades híbridas; en cambio la de Lomas de Zamora (UNLZ) retomará la presencialidad plena. Autoridades, docentes y estudiantes hacen un balance de lo ocurrido en la pandemia y plantean sus expectativas.
El protocolo
El protocolo marco que se aplicará en las universidades contiene un piso mínimo de requerimientos para la apertura de las casas de estudios e institutos e insta a cada institución a la definición de criterios específicos que se adapten a las particularidades de las actividades que realizan. Distancia social, ambientes ventilados, uso de mascarilla e higiene de manos son las principales obligaciones.
En diálogo con AUNO, el rector de la UNAB, Pablo Domenichini, destacó el protocolo aprobado por los consejos federales de Salud y Educación y calificó como prioridad su “respeto estricto” para gestionar con responsabilidad los espacios de la institución y “promover la salud y el bienestar” de los estudiantes. La casa de estudios no exigirá el pase sanitario, al igual que las universidades de Lomas y Lanús.
La presencialidad como prioridad
El presidente del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), Rodolfo Techi, consideró que los resultados de las clases virtuales son “positivos”, con las nuevas tecnologías (Meet, Zoom y plataformas propias de las instituciones) integradas a la vida universitaria.
La modalidad virtual tiene sus ventajas: puede “facilitar los tiempos” y equivale a la presencialidad cuando es en tiempo real, de acuerdo con lo que plantea la Comisión de Evaluación y Acreditación Universitaria. Antes de la pandemia, alcanzaba al 10 por ciento de los universitarios en la Argentina, indicó Techi. No obstante, la presencialidad es “fundamental” para las materias prácticas y “prioritaria” para los alumnos de los primeros años, quienes tienen que familiarizarse con talleres y laboratorios.
En sintonía, el secretario general de la Federación de Docentes Universitarios (FEDUN), Daniel Ricci, resaltó el valor de la presencialidad plena y el mantenimiento de “componentes” de la virtualidad, como “plataformas virtuales y redes sociales”, herramientas que pueden generar “un mejor proceso educativo”.
Las universidades del conurbano, entre la virtualidad y la presencialidad
Domenichini informó que en la UNAB se mantendrá una de las herramientas virtuales más “importantes” utilizadas por los estudiantes en estos últimos dos años: el campus virtual. En ese espacio los alumnos y docentes, que interactúan desde el comienzo de las clases virtuales en 2020, se “han ido perfeccionando y adaptando con excelentes resultados”, puntualizó el rector.
Por su parte, su par de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV), Jorge Calzoni, recordó que antes de la pandemia “algunas actividades eran de manera virtual” y anticipó que “se seguirán manteniendo así en los casos en los que no se pueda cursar de manera presencial en alguna sede por obras de remodelación edilicia”. Las clases comenzarán el 8 de abril.
La jefa de trabajos prácticos de Radio y Taller de Radio de la UNLZ, Alicia Paz, contó que durante las clases virtuales los estudiantes trabajaron de “manera óptima” en las dos materias: “Fue posible trabajar, hacer producciones radiofónicas y microprogramas que lograron hacer con ayuda técnica de los docentes”. Resaltó el “entusiasmo” que representa para los docentes volver a las aulas. Las clases comenzarán este lunes.
Pablo Méndez, docente de las carreras de Ciencias Políticas y Gobierno y Diseño y Comunicación Visual de la UNLA, detalló que se promoverá un “híbrido” entre la virtualidad y la presencialidad y la vuelta a las aulas será de manera “gradual”.
Méndez aseveró que la virtualidad generó “desventajas”, ya que no permitió una “correcta socialización y construcción de hábitos universitarios” y “despersonaliza” las maneras de aprender.
Pablo Corcuera, uno de los encargados de prensa de la UNLA, anticipó que a partir de este año la cursada de las materias, que inicia el lunes, será semipresencial.
Qué dicen les estudiantes
Carola Suárez, alumna del Profesorado de Comunicación de la UNLZ, explicó que por su “disponibilidad horaria” y la poca apertura de materias y días que a veces tiene la facultad “no le conviene volver a la presencialidad plena”.
Carola tiene hijos en edad escolar, exigencias y responsabilidades, por lo cual aprovechó la cursada virtual para ponerse al día con su carrera ya que ahorra tiempo en viajes.
“El sistema bimodal solucionaría muchos inconvenientes, además de dar la posibilidad a muchos estuantes de cursar”, reflexionó Suárez, que esperará la “posibilidad de que haya materias que den esa chance”.
Por el contrario, Leandro Álvarez, un estudiante de tercer año de la Licenciatura en Artes Visuales de la UNLA, destacó la “importancia” de la vuelta a la presencialidad para poder “aprovechar” el uso del Centro de Estudios de Producción Sonora y Audiovisual para las materias prácticas que se realizan allí.
En las materias que tienen prácticas en estudio, “se pasa tiempo con los compañeros y se aprende a trabajar en equipo, se manejan las distintas herramientas que no se llegan a conocer estudiando de manera virtual”, concluyó el alumno.
AUNO-26-03-2022
RR-MDY
