Lomas de Zamora, mayo 5 (AUNO).- La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la emergencia sanitaria mundial ante el aumento de los contagios de polio en los últimos seis meses y tras detectar casos en más de una decena de países.
La decisión fue tomada por la directora general de esa organización sanitaria, Margaret Chan, debido a los contagios, que pueden ser una amenaza para el resto del mundo.
Al respecto, se indicó que en los últimos seis meses se detectaron casos en Afganistán, Camerún, Etiopía, Guinea Ecuatorial, Irak, Israel, Nigeria, Pakistán, Somalia y Siria.
En este sentido, el director general adjunto de la OMS, Bruce Aylward, durante una conferencia de prensa, sostuvo que “dado que se ha comprobado la efectiva exportación e importación del virus, consideramos que esto constituye una amenaza para el resto de países y se justifica decretar una emergencia sanitaria”.
Además, manifestó que uno de los argumentos que más pesó al tomar la decisión es el hecho de que la transmisión se haya dado en lo que se considera “la baja estación” de enero a abril, los meses en los que el virus de la polio “normalmente” no se contagia tanto.
Aylward comentó, que este hecho hace temer que en el período de “alta transmisión”, que comienza en mayo, el contagio pueda multiplicarse, y poner en peligro la estrategia misma de erradicación de la enfermedad.
Preguntado específicamente sobre ese punto, dijo “confiar” en que el mundo pueda acabar con este mal de aquí¬ a 2018.
Desde la Organización Mundial de la Salud se reseño que la poliomielitis es una enfermedad muy contagiosa causada por un virus que invade el sistema nervioso y puede causar parálisis en cuestión de horas.
“El virus entra en el organismo por la boca y se multiplica en el intestino. Los síntomas iniciales son fiebre, cansancio, cefalea, vómitos, rigidez del cuello y dolores en los miembros”, según detalló el organismo en su página de Internet.
En Argentina, el Ministerio de Salud informó que la enfermedad se encuentra eliminada desde hace 30 años, cuando en 1984 se registró el último caso, gracias a la incorporación de la vacuna Sabin en el Calendario Nacional de Vacunación con una cobertura superior al 95 por ciento.
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