Epidemia de bronquiolitis: pico de casos, demanda de atención y falta de pediatras en los principales hospitales de la zona

Ante la llegada temprana de la enfermedad, los centros de atención médica de la región implementan diferentes estrategias para dar respuesta a la demanda de las familias. La atención ronda los 200 y 300 pacientes por día en medio de una crisis de pediatras a nivel nacional. Informe especial de Agencia AUNO.

Por Valentina Sanza y Francisco Moreno

Los hospitales de la región afrontan “la peor epidemia de bronquiolitis”, tal como lo expresó el ministro de salud bonaerense, Nicolás Kreplak, en medio de una crisis de personal médico en el área pediátrica, denunciada por la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (CICOP).

Médicos pediatras y directivos de distintos hospitales de las localidades de la Zona Sur del Conurbano bonaerense señalaron a AUNO que se tomaron de forma anticipada medidas para aumentar la capacidad operativa de los centros, con salas de internación abreviada, camas y bocas de oxígeno, para lograr una atención de 200 a 300 pacientes por día.

Los médicos consultados coincidieron en que la epidemia de bronquiolitis responde a un “silencio inmunológico” producto de la pandemia por Covid-19 ya que los niños y niñas, al estar recluidos en sus casas, no tuvieron contacto con sus pares, lo que evitó el contagio y, por consiguiente, que se generen las defensas ante este virus.

El director ejecutivo del Hospital Gandulfo de Lomas de Zamora, Fernando Guerrero, explicó a esta agencia que preveían que la crisis de bronquiolitis sería “muy fuerte” y se “iba a adelantar”, por lo que se tuvo que “aumentar la capacidad operativa” y sumar “cantidad de camas y de bocas de oxígeno para poder dar servicio a los vecinos”.

En este sentido, el centro aumentó “la capacidad operativa”: se duplicó la cantidad de “las camas de internación”, se “reforzó el área de Enfermería” y se transformó “el Hospital de Día de adultos en Internación Pediátrica”, detalló Guerrero. 

En cambio, el Hospital Oñativia de Rafael Calzada, en Almirante Brown, se encuentra con su servicio de Pediatría “estallado”, tal como resaltó a AUNO su director ejecutivo, Helio Navarro, quien detalló que tuvieron “hasta seis chicos con respirador” durante una semana.

Además de la epidemia, Navarro expresó que otro problema que afrontan es “la falta de pediatras” producto de “una falta de vocación” por un lado, y por tener “los sueldos más bajos” en Salud, lo que ocasiona que “la gente no quiera estudiar medicina”.

Por su parte, el Hospital Evita, en el municipio de Lanús, cuenta con un “espacio de sala de internación abreviada” equipada con ocho cunas “para tener internados pacientes que no superan las cuarenta y ocho horas de nacidos”, detalló la jefa del área de Pediatría Silvia Marone.

Además, agregó que las camas “no se encuentran ocupadas en su totalidad” ya que el aumento de infecciones es “por periodos”, pero que las infecciones respiratorias ahora son de “mayor gravedad, tiempo de duración y engloba otros grupos etarios” y esto se debe al “silencio inmunológico” durante los años de pandemia.

El hospital lanusense está recibiendo muchos casos de pacientes con influenza, que “no son lo habitual” por lo que pusieron “mayor foco y alarma” a la contingencia ya que se podía “prever una semana epidemiológica distinta”, detalló Marone en diálogo con AUNO.

La jefa de Pediatría explicó que cuentan con un sistema “que evalúa frecuencia cardíaca, frecuencia respiratoria y uso de músculos accesorias” para determinar “qué pacientes deben quedar en sala de internación abreviada o ingresar a terapia intensiva”.

La dificultad respiratoria y para alimentarse o dormir, la presencia de fiebre y la obstrucción de la vía aérea superior son algunos de los síntomas que presentan quienes padecen esta enfermedad y son tratados con “el uso de oxígeno suplementario” y en caso de no obtener una mejora se utiliza salbutamol y broncodilatador.

Por su parte, el médico pediatra y director del Evita, Javier Maroni, detalló que su hospital “recibe derivaciones de muchos lugares” ya que cuenta “con tres pediatras en la guardia externa, dos en el piso y dos en terapia intensiva”.

En este sentido, expresó que “todo el hospital está en clave bronquiolitis”, con una ocupación del área pediátrica del 70 por ciento de la capacidad total y una atención de 200 pacientes por día.

Los especialistas coinciden que lavarse las manos, ventilar los espacios y cumplir con el calendario de vacunas constituyen las principales medidas a tomar para evitar el contagio o la recaída de bronquiolitis.

Una crisis anticipada

Kreplak explicó a través de su cuenta de Twitter que la epidemia de bronquiolitis “es grave” y “no solo pasa en la provincia de Buenos Aires”, sino que pasa en todo el país y pasó en países del “hemisferio norte en la última temporada”.

En este sentido, el Ministerio de Salud de la Nación organizó una reunión en el Hospital Garrahan con sus homólogos de la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires para analizar el estado de situación ante un aumento del 84,9 por ciento del Virus Sincicial Respiratorio (VSR), causante de la bronquiolitis.  

La directora Nacional de Epidemiología e Información Estratégica, Analía Rearte, explicó que la circulación del virus se adelantó “entre tres y cuatro semanas a la estacionalidad que tenía”, y que se da “principalmente en el AMBA” y “en otras provincias de la región Centro”.

En este sentido, Rearte detalló en un comunicado que durante 2022 hubo “circulación de muchos virus respiratorios de una manera bastante anárquica y no dentro de la estacionalidad” a la que estaba prevista.   

“Es muy importante que las personas con factores de riesgo estén vacunadas para disminuir la posibilidad de internación”, alertó la directora ante la circulación del VSR y del virus de la influenza, ya que “posiblemente en el transcurrir del invierno circule mayoremente”.

A la situación de la bronquiolitis, se le suma una crisis en el área de pediatría debido a “una falta de fuerza laboral”, tal como expresó el secretario general de CICOP, Aníbal Aristizábal. La CICOP ya había denunciado esta situación ante la cartera de salud nacional y a su vez, reclamó por medidas que resuelvan la crisis que atraviesan las áreas de pediatría, salud mental y atención primaria.

Por su parte, la Sociedad Argentina de Pediatría se manifestó ante la “delicada situación epidemiológica” y expresó su reconocimiento “a las y los pediatras que, una vez más, están desempeñando su tarea con dedicación en todo el país”. 

La Comisión Directiva destacó “la tarea de los miles de pediatras que anónimamente honran su profesión”, en lo que consideran “un escenario difícil para el ejercicio profesional de la pediatría”, informó en un comunicado.

Al respecto, se refirieron a las “difíciles condiciones laborales”, las cuales consideran  “inaceptables” debido a la “alta carga laboral, inestabilidad en los empleos, falta de estímulo para el crecimiento, situaciones de violencia, baja remuneración” sumado a una “necesidad del pluriempleo para llegar a fin de mes y falta de oportunidades para actualizarse en la profesión”.

¿Qué es la bronquiolitis?

La bronquiolitis es una infección respiratoria aguda causada comúnmente por el Virus Sincicial Respiratorio (VSR), que “afecta principalmente las vías respiratorias altas y en algunos casos las bajas” y es muy común “para los niños lactantes y menores de tres años”, explicó el virólogo del Conicet, Patricio Acosta.

La enfermedad, que ocurre con mayor frecuencia en los meses de otoño e invierno, produce dificultad para respirar, alimentarse o dormir, además de tos y decaimiento, y es tratada en niños menores de un año con Palivizumab, un anticuerpo especial que se utiliza para prevenir que sean internados.  

Para prevenir el contagio, el Ministerio de Salud de la Nación recomienda mantener la lactancia materna; evitar exponer a niños y niñas al humo; higienizar con agua y jabón los juguetes u otro elementos de los menores, además de las superficies donde se los cambian; lavarse las manos frecuentemente; mantener ventilados los ambientes y evitar el contacto de los menores con personas resfriadas o con tos.

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VS-FM-SAM

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