Lomas de Zamora, agosto 12 (AUNO).- “No olvidamos, no perdonamos ni nos reconciliamos. El Estado es responsable”. La voz de Nora Cortiñas, madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, resume el sentir de una Plaza de Mayo que latió fuerte para exigir la aparición de Santiago Maldonado, el joven artesano que fue visto por última vez el 1° de agosto durante la represión de Gendarmería en el Lof de Cushamen, Chubut, tras el corte de la ruta 40 en reclamo por la libertad del lonko Facundo Jones Huala.
El viernes por la tarde, bajo la lluvia, miles de personas llegaron a la “Plaza del pueblo”. La convocatoria fue sin banderas políticas. Al menos eso fue lo que pidieron los familiares de Maldonado cuando, en conjunto con la Mesa de Organismos y Encuentro Memoria Verdad y Justicia, organizaron la movilización.
Se escuchó a los distintos referentes hablar entre sí. Vanesa Orieta –hermana de Luciano Arruga- y Pablo Pimentel –presidente de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de La Matanza- decir a las 16,30 que “la convocatoria estaba extraña”, que “había poca gente” y que “es indignante cómo los medios buscan tergiversar el tema de la desaparición forzada”.
Pero poco a poco, la Plaza fue colmándose de gente que llegaba con la imagen de Maldonado. Una columna enorme llegaba por Avenida de Mayo con la participación de algunos partidos políticos que, en plena veda electoral, levantaron banderas de Movimiento Al Socialismo (MAS), Partido Obrero, Frente de Izquierda y otros.
La multitud, bajo las cámaras de los drones, copó la Plaza y se aglomeró alrededor del escenario para esperar la espera del documento.
Ya sin lluvia, las agrupaciones bajaron sus banderas después del insistente pedido de las oradoras. “Leeremos algunas adhesiones, mientras esperamos a que los partidos bajen sus banderas, porque la bandera que llevemos tiene que ser la de Santiago, por su aparición ya”.
Hubo coros populares porque la gente se sentía en otro 24 de marzo. “Como a los nazis les va a pasar, a dónde vayan los iremos a buscar”.
Abuchearon a la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, por no haber asistido al pedido de declaración en el Congreso durante la semana pasada.
Cuestionaron a los medios. En especial a Canal 13 por difundir una información falsa, en la que supuestamente se veía a Santiago Maldonado por la cámara de un autoservicio en Entre Ríos sin ninguna preocupación. Algo que horas más tarde fue desmentido por el joven que aparecía en la cinta y que denunció la falta de rigor en la información difundida.
El documento que se leyó tuvo la característica de fue redactado en conjunto por diferentes organismos. “Ameritaba un reclamo masivo porque realmente no podemos permitir que sigan desapareciendo personas en democracia”, afirmó a AUNO Nora Cortiñas.
“Toda responsabilidad es del Estado”, remarcó Taty Almeida, al igual que Horacio Verbitsky, titular del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), y Norma Ríos, de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), los otros oradores. Explicaron en el documento que “a Santiago Maldonado se lo llevó la Gendarmería. Testigos afirman que lo golpearon y se lo llevaron”.
Cada vez que se nombraba a la ministra Bullrich o al presidente Mauricio Macri se escuchó reprobación. Los abucheos fueron constantes.
Al finalizar, Sergio Maldonado, hermano de Santiago, subió junto a su pareja al escenario. Agradecieron juntos la colaboración que recibieron por partes de todos los organismos de Derechos Humanos y el acompañamiento de los sectores populares en pie de lucha.
Sostuvieron que “lo más importante es la aparición de Santiago” porque lo quieren “de nuevo acá”.
“Nos acusan a nosotros de que no colaboramos, cuando ya están hechos los peritajes. Nosotros decimos lo que está en los informes”, afirmó Sergio en respuesta directa a Bullrich, que había manifestado que “la familia de Maldonado y los mapuches no colaboran”.
“Los medios buscan decir que estamos en contra de la comunidad y eso es mentira. Siempre acompañamos y apoyamos a la comunidad. Por eso Santiago estaba ahí defendiendo el territorio con los demás”, afirmó Adriana Atico, cuñada de Maldonado.
Atico, además, denunció que la forma en la que se desarrolló el operativo “fue una falta de respeto” por no haber hecho el rastrillaje y las pericias a las 24 horas de la desaparición forzada.
Cómo últimas palabras, Cortiñas volvió a pedir “la aparición de Jorge Julio López ya, la aparición de Santiago ya, 30 mil detenidos desaparecidos presentes”. Rodeada por Pablo Pimentel, de APDH-La Matanza, el premio Nóbel de la Paz y titular de Servicio de Paz y Justicia (SERPAJ), Adolfo Pérez Esquivel, entre otros.
La desaparición
Santiago Maldonado tiene 28 años y hacía unos meses se había mudado a la Patagonia. Se unió la lucha de la comunidad mapuche por la recuperación de su territorio ancestral, que fue comprado por terratenientes extranjeros como el empresario italiano Luciano Bennetton.
El 1° de agosto se realizó una manifestación en la ruta 40, en la que se reclamaba la libertad a lonko Facundo Jones Huala, que se encuentra preso desde fines de junio luego de que las autoridades chilenas pidieran su captura, tras ser acusado de haber participado de un ataque en el que se incendió un campo de la zona de Valdivia en 2013. Jones Huala ya había sido juzgado por ese episodio y ya había recuperado la libertad.
Durante la manifestación en la ruta, la Gendarmería bajo orden judicial desalojó a los manifestantes con balas de goma y de plomo, dejó varios heridos y se llevó detenido a Maldonado, de quién ahora se desconoce su paradero.
AUNO 12-08-17
FC-MFV