Lomas de Zamora, mayo 18 (AUNO) – El presidente de Ecuador, Rafael Correa, aseguró que América Latina es el “continente más desigual del planeta” y subrayó que “cualquier proceso de cambio verdadero” debe implicar “distribución del ingreso, justicia social e igualdad de oportunidades”.
El mandatario ecuatoriano recibió el miércoles el Doctor Honoris Causa en la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) acompañado por rectores de universidades de todo el país, el ex secretario de la Presidencia Oscar Parrilli, y León Gieco, quien brindó un breve recital.
Su formación académica y su compromiso político se plasmaron en “políticas de desarrollo que han generado reconocidos avances en términos de crecimiento económico, acompañado de una sostenida reducción de la pobreza, la desocupación y las desigualdades sociales en Ecuador”, señala la resolución de la UNQ que lo premia.
El mandatario brindó la clase magistral “Economía del desarrollo” en América Latina con un balance de las acciones durante la “década ganada ecuatoriana” y diferenció, a través de cuadros comparativos, lo realizado durante sus años de gestión contra los de los “gobiernos neoliberales” predecesores.
“Estamos en el continente más desigual del planeta. Encontraremos ricos más ricos que en Suiza y pobres más pobres que en África. Por eso cualquier proceso de cambio verdadero tiene que empezar y terminar hablando de distribución del ingreso, de justicia social e igualdad de oportunidades”, destacó Correa en la actividad.
El jefe de estado también señaló que quiere una sociedad “con mercado” y no “de mercado”, y destacó que el mercado “debe ajustarse a las necesidades sociales, y no la sociedad a las necesidades del mercado”.
“Hemos luchado por transformar el estado burgués dominado por unos pocos a un estado popular que defiende el bien común y el interés general”, sostuvo.
Equipo de patriotas
Correa mencionó la importancia de tener “un equipo de patriotas” para afrontar los problemas que surgen al gobernar un país.
Además, explicó que “lo político es más importante que lo técnico”, y subrayó que para sacar adelante a un país “no se necesitan gerentes sino hombres políticos”.
En ese sentido, advirtió: “No caigan en la trampa de los que dicen todos los políticos son malos y corruptos, y que por eso deben dejarse gobernar por gerentes. Ellos vendieron esta idea de que la política es corrupta, y que por lo tanto, son la única alternativa”.
El presidente ecuatoriano, que le entregará el próximo 24 de mayo el gobierno a su sucesor, Lenin Moreno, agregó que estuvo “encantado” de que Argentina haya sido “el último viaje como presidente al exterior”.
Este fue su decimosexto Doctorado Honoris Causa y se sumó al listado de los ya distinguidos por la UNQ Héctor Cámpora, Raúl Alfonsín, Evo Morales, Cristina Fernández de Kirchner, Adolfo Pérez Esquivel y Estela de Carlotto, entre otros.
AUNO-18-05-17
FS-SAM