El corte de vías a la altura de Avellaneda que tuvo lugar pocos días atrás y que terminó con incidentes en el hall de Constitución no fue una protesta aislada. Fue la explosión de un conflicto laboral que ya lleva varios años producto de la tercerización de 1500 trabajadores ferroviarios que reclaman su pase a la planta permanente de UGOFE, la empresa estatal que tiene a su cargo la Línea General Roca.
La Comisión Salvemos al Tren es un espacio en el que confluyen algunas líneas internas del sindicalismo de este rubro, opositora a la gestión del secretario general de la Unión Ferroviaria, José Pedraza. Norberto Rosendo, dirigente histórico de esa agrupación, precisó a AUNO que “un trabajador de planta permanente cobra 3000 pesos por mes, aproximadamente, mientras que los tercerizados cobran 1500. Así, el tercerizador se está robando 1500 pesos mensuales por cada trabajador”.
Rosendo le apuntó a UGOFE como máximo responsable de esta situación en la que se encuentran 1500 trabajadores. Sin embargo, señaló que este problema se remonta “a la privatización del tren” que tuvo lugar bajo el gobierno menemista. Si bien UGOFE —que se hizo cargo del servicio durante la presidencia de Néstor Kirchner— mejoró el mantenimiento de los trenes y las vías, no modificó la “política de tercerización”, criticó el dirigente.
Una empresa “tercerizadora” brinda servicios a otra firma que no puede hacerse cargo de ellos. Por ejemplo, el mantenimiento y limpieza de las estaciones es una actividad que no realiza el personal de UGOFE, sino de otra compañía contratada por ella. Y si bien UGOFE no respondió la requisitoria de esta agencia, había desconocido su relación directa con los trabajadores, señalándolos como empleados de empresas tercerizadas de vigilancia, limpieza y obras en las vías.
“Lo que se está reclamando es la eliminación de los tercerizados y que todos pasen aplanta permanente” de la empresa estatal, señaló Rosendo. Por su parte, el dirigente del Partido de los Trabajadores Socialista (PTS) Christian Castillo sintetizó esta exigencia en cuatro palabras: “Igual trabajo, igual salario”.
Castillo, miembro de la rama del PTS que está inmersa en el conflicto, señaló a esta agencia que muchos de los trabajadores afectados por esta situación “llevan tres o cuatro años como contratados” y que el convenio laboral en ese marco “tiene una retribución salarial muy pobre”. Sobre este esquema, el dirigente hizo además un análisis político-económico: “Esto pasa en diferentes lugares. Es una forma de bajar salarios y al mismo tiempo dividir a los trabajadores para que no se agrupen”.
EL GERMEN DEL CONFLICTO ACTUAL
Si bien el problema de las tercerizaciones se remonta a la década de 1990 y constituye el fondo del conflicto que se vive actualmente, el detonante fueron 150 despidos que tuvieron lugar diez días antes del corte de vías en Avellaneda. A su vez, este hecho desnudó una situación que se ha convertido en una constante del sindicalismo argentino: el descontento por parte de un grupo de trabajadores con la conducción gremial.
Rosendo advirtió que la Unión Ferroviaria no reaccionó ante el recorte de personal que motivó el piquete en las vías de Avellaneda. Y es que el mismo sindicato “es el responsable” de esos despidos. “En el Roca hay una tiranía por parte de la Lista Verde (oficialista), que impide que haya una renovación sindical. Si formas una lista opositora te echan. Por eso echaron a 150 personas”, aseguró.
Es que “acá se mezclan las cosas porque esta gente no pertenece al personal ferroviario y no podemos hacer nada por ello”, declaró secretario administrativo del gremio, Juan Carlos Fernández, a un diario porteño.
Pablo Villalba, delegado de los trabajadores tercerizados, acusó: “Vemos personas que son de la Lista Verde de la Unión Ferroviaria que responden a ese gremio”, que “fueron los mismos que generaron los incidentes el miércoles”. Fue por este motivo que quienes realizaron la protesta acordaron levantar la medida de fuerza prevista para esta tarde, no sin dejar en claro el estado de asamblea permanente.
La tensión en el ámbito ferroviario continúa al ritmo de asambleas de trabajadores que analizan las medidas de fuerza a tomar para que la empresa incluya en la planta permanente a las 1500 personas tercerizadas.
PS-DR-AFD
AUNO-23-07-10