Dentro de pocos días se cumplirán tres meses desde que la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) realizó elecciones internas para definir una nueva conducción.
A pesar del tiempo transcurrido, todavía el proceso electoral sigue trabado a raíz de los desacuerdos generados a partir de las irregularidades detectadas en varias provinciales y en la seccional Esteban Echeverría-Ezeiza, donde anularon las elecciones.
En ese sentido, anoche y hasta esta madrugada los sectores en pugna de la CTA, Hugo Yasky y Pablo Micheli, negociaron para lograr un acuerdo sobre la fecha, la junta electoral y qué se elegirán en Tucumán, unas de las provincias donde se anularon también las elecciones del 23 de septiembre.
Voceros del sector de Yasky y de Micheli admitieron que sólo hubo acuerdo en el tema de los padrones y que subsisten las diferencias en torno a la composición de la junta electoral.
Ambos grupos habían acordado que las elecciones complementarias se realizarían el 9 de diciembre, pero Yasky salió hoy a desmentir esa fecha y acusó a Micheli de haber realizado un anuncio por su cuenta, sin el aval de su sector, aunque anoche las segunda líneas parecía que habían consensuada ese día.
Otras diferencias entre ambos sectores es qué elegir en Tucuman: Yasky allí quiere que se elijan las conducciones nacional y provincial, pero Micheli quiere que los tucumanos de la CTA sólo sufraguen por autoridades nacionales, mientras que se mantienen las disidencias por la conformación de la junta electoral.
Los lugares donde deberían hacerse nuevas elecciones son Mendoza, Tucumán y Misiones, mesas de otras 7 provincias y en la seccional bonaerense de Esteban Echeverría-Ezeiza.
El total de habilitados para votar en las elecciones complementarias ronda los 200 mil afiliados.
Por otra parte, voceros de ambos sectores admitieron que esperarán a definir la nueva conducción de la entidad sindical, en medio de un proceso electoral de final incierto, para encarar una nueva ofensiva en pos de conseguir la personería.
AUNO 26-11-10
FL-HRC-EV