Lomas de Zamora, noviembre 29 (AUNO).- La justicia federal de La Plata condenó hoy a casi 30 años de prisión a Carlos Garzón como el responsable del “secuestro extorsivo” y “homicidio triplemente calificado” de Diego Peralta, el adolescente de 17 años de El Jagüel, que en 2002 fue asesinado. Los padres del chico se mostraron conformes con la sentencia pero aseguraron que seguirán denunciando al juez federal de Lomas de Zamora Carlos Ferreiro Pella por considerar que tuvo un “mal desempeño” en el inicio de la causa judicial.
A pesar de que la fiscalía y la familia habían pedido 37 años y medio de cárcel para Garzón, la madre de la víctima Emilce Silva dijo a AUNO que está “más que conforme” con la pena de 29 años, once meses y 27 días de prisión.
“Se puede creer en la Justicia. Yo sabía a dónde quería llegar. Estoy feliz y ahora voy por el jury (juicio político que se realiza a los jueces) a Ferreiro Pella porque se burló de una familia humilde, me subestimó como madre y como mujer”, denunció Emilce.
Además de acusar al magistrado, Emilce apunta a la Brigada Antisecuestro que operó durante el secuestro de Diego: “A mí me mintieron, el policía que me tómo la denuncia me dijo que iba a salir con la camioneta y con fotos de Diego a buscarlo, pero recién lo hizo 15 días después”.
Al momento de escuchar la decisión de los jueces “no sabía cómo reaccionar, no sabía si reír o llorar”, contó Emilce y se mostró confiada en los próximos pasos en la causa al sostener que “la verdad va a salir a la luz. Yo vivo y muero cada día de mi vida por el atroz asesinato de mi hijo. Me duele pero a la vez me da fuerzas para seguir. Voy a seguir hasta el último segundo de mi vida buscando Justicia”.
El juicio es el segundo que se realiza en el Tribunal Oral Federal 1 de La Plata que es el mismo que en 2008 condenó a siete personas por la muerte del joven.
EL CASO FECHA A FECHA
La mañana del 5 de julio de 2002, Diego Peralta iba en remis al colegio cuando una banda de secuestradores lo cruzó con un auto y lo capturó.
El joven fue llevado al barrio Plátanos, en Berazategui, desde donde los captores pidieron a Luís Peralta, padre la víctima, 200 mil dólares, de los cuales sólo pudo pagar 2 mil, más 9 mil pesos.
A pesar del pago, Diego fue asesinado porque, según confesó uno de los detenidos, creían que el joven los había visto y podía reconocerlos.
El cuerpo de la víctima apareció el 12 de agosto de ese año en una tosquera de Ezpeleta.
En 2008, la Justicia de La Plata condenó a perpetua a Marcelo “Chelo” Cejas, el arrepentido que delató a la banda; Julio César Rotella; David “Chaca” Pereyra; Rosa Pistillo, “La Gorda Rosita”, y Enrique “Baty” Báez. En tanto, Lauro “El Chino” Shimabukuru fue sentenciado a 10 años y José Pablo García a cinco.
Por otra parte, Diego Fermín, el remisero que llevaba al chico el día que lo secuestraron, fue absuelto.
El 10 de noviembre de este año comenzó el segundo juicio, esta vez a Garzón, quien estuvo prófugo dos años en Paraguay hasta que fue detenido en noviembre de 2004 y extraditado a la Argentina, sospechado de ser el cabecilla de la banda.
Esta tarde, los jueces Joaquín Carlos Ruggero, Mario Gabriel Reynaldi y Héctor Carlos Acuña lo sentenciaron a la pena de 29 años, once meses y 27 días de prisión por la participación en el secuestro y homicidio de Diego, y por el robo del auto que cruzó al remis en el que se trasladaba la víctima la mañana en que fue capturado.
YGC-AFD
AUNO-29-11-10