La articulación con Esteban Echeverría

El reconocimiento a Perelló, Saladino y Wettengel fue una propuesta de la presidenta del Concejo Deliberante echeverriano, Analía Pérez, en conjunto con el director de Derechos Humanos municipal, Matías Barraza, quien aseguró a AUNO que es muy «valioso distinguir» a las tres mujeres con quienes la comuna viene trabajando desde hace muchos años. Con Saladino […]

El reconocimiento a Perelló, Saladino y Wettengel fue una propuesta de la presidenta del Concejo Deliberante echeverriano, Analía Pérez, en conjunto con el director de Derechos Humanos municipal, Matías Barraza, quien aseguró a AUNO que es muy «valioso distinguir» a las tres mujeres con quienes la comuna viene trabajando desde hace muchos años.

Con Saladino pusieron en marcha el proyecto «Echeverría Construye Memoria», un sitio web que incluye casos a investigar y programación de visitas guiadas por los diferentes sitios de memoria del distrito con los estudiantes locales.

«Este proyecto tiene que ver con generar memoria y que los habitantes de Esteban Echeverría conozcan ya que muchos no saben quién fue Elisabeth, Carlos Ochoa, los hermanos Torres o los compañeros de la fábrica Armanino. Hay vecinos que no saben que viven al lado de un hermano, hijo o pariente de una víctima de terrorismo de Estado”, explicó Barraza.

La integrante de la Comisión El Vesubio y Puente 12 contó que de este último Centro Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio hubo desaparecidos que pasaron por “La 205”, ubicado en la localidad de 9 de Abril. En esa dependencia de la Policía de la provincia de Buenos Aires funcionó durante 1976 un centro de reclusión ilegal.

En La 205 actuaron miembros de la Policía Federal y la bonaerense bajo la orden del primer Cuerpo de Ejército. El lugar fue un centro de detención de embarazadas, mujeres que recién habían dado a luz y personas enfermas. Hoy en el predio funciona el Grupo de Prevención Motorizado de la Superintendencia de Seguridad Vial de la provincia.

“De Puente 12, unos secuestrados del año 1975 aparecieron en 2012” en el barrio Sarmiento y se les hizo un homenaje. El descubrimiento se dio “cuando querían hacer las casas, sacaban tierra cerca del Río Matanza que pasa por ahí y hallaron los restos”.

Se trataba de Sebastián Llorens, Diana Miriam Triay, ambos militantes del PRT-ERP, y dos personas más. “Tuvimos 16 secuestrados en la Masacre de Monte Grande, tanto sobrevivientes de Vesubio como Puente 12 pasaron por la Comisaría y muchos restos terminaron en el cementerio de Monte Grande”, detalló.

Alicia por su parte, hasta antes de la pandemia colaboró durante algunos años con Aida Bogo de Sarti, la única Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora del distrito. Con ella conformaron el Observatorio de Derechos Humanos de Esteban Echeverría y Ezeiza. En su momento fueron convocadas por la secretaria de Desarrollo Social del distrito, Paula Ferro, para aportar la nómina de ciudadanos desaparecidos.

Los casos informados correspondían a Ezeiza y Echeverría, dado que hasta 1994 fueron un solo municipio. “Entendiendo que toda lucha es colectiva hace unos años conformamos la Mesa de DDHH Echeverría-Ezeiza que está integrada por militantes de agrupaciones políticas, asociaciones sindicales, organizaciones sociales y civiles y organismos de DDHH”, detalló Alicia.

En su carácter de coordinadora de DDHH del Banco Provincia (2004-2014) fue convocada más de una vez para dar charlas en ambos distritos sobre la tarea que realizó: lograr el reconocimiento oficial de la situación de desaparición forzada de personas y de los trabajadores detenidos y desaparecidos durante la última dictadura.

Esto implicaba recorrer su historia hasta el momento de su desparición y desvinculación con el banco, lo llevó a “reconocer los derechos vulnerados de sus familiares”. Desde la mesa de DDHH local realizan actividades, tanto virtuales como presenciales, sobre distintas temáticas vinculadas a problemáticas locales.

Entre las que destacan la señalización de los Sitios de Memoria: el Cementerio de Monte Grande, La ex 205 y La Casa de la Masacre de Monte Grande. También acompañan el proyecto de «Baldosas por la Memoria» junto a Felipe Ochoa, trabajador del Banco de la Nación Argentina.

La última baldosa colocada fue en la Fábrica Argentina de Porcelanas Armanino (FAPA), de Monte Grande, para recordar a Bonifacio Díaz, Marta Alonso y Victoria Graciela Borelli, quienes fueron detenidos y desaparecidos entre el 1 y el 20 de agosto de 1976. La iniciativa surgió tras un pedido que hizo el Colectivo de Educación por la Memoria, la Verdad y la Justicia el último 24 de marzo.

KC-AFD

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