Plan de Seguridad: crítica y propuesta

María Teresa Schnack, madre de un joven asesinado por el gatillo fácil, fundó una asociación para exigir justicia junto a familiares de otras víctimas. Analiza críticamente el Plan de Seguridad impulsado por el Gobierno nacional, marca las diferencias con la propuesta que la entidad presentó al Ministerio de Justicia y reflexiona sobre el efecto Blumberg en la sociedad.

Por Elisabet Contrera

(AUNO-Tercer Sector*) Un prendedor con la foto de su hijo aparece en el saco, del lado del corazón de María Teresa Shnack, y resume una actitud: la memoria del hijo que exige que se haga justicia. Preside la Comisión de Familiares de Víctimas Indefensas, ese arma letal que pone el sello a la impunidad y que terminó con la vida de Sergio Schiavini, asesinado en 1992 cuando quedó en medio de un tiroteo entre cuatro delincuentes y cuarenta policías.
Desde ese momento decidió convocar a los familiares que padecen el mismo dolor porque está convencida de que muchos dolores juntos pueden hacer renacer nuevas esperanzas. Señaló que el plan de seguridad nacional es ‘una lista de buenas intenciones’ y dice que Blumberg debería estar más cerca de los que comparten el mismo dolor que él.
¿ Qué opina sobre el Plan Estratégico de Justicia y Seguridad lanzado por el Gobierno nacional?
El plan de seguridad no está bien aclarado. Si bien nos dieron un panorama general de las cosas que quieren cambiar, creo faltan muchas otras. Pero al margen de eso, lo lamentable es que consultan cuando la torta esta cocinada. Por eso, creo que es hora de que todos empecemos a participar de la toma de decisiones porque si no nos dan todo hecho y después tenemos que salir a cuestionarlo.
¿Cuáles son las diferencias más notables con la propuesta que el Cofavi presentó al ministro de Justicia?

Uno de los puntos de nuestra propuesta es que los jueces, fiscales y camaristas sean elegidos por los ciudadanos, permanezcan en sus puestos
por pocos años y sean ascendidos solo en caso de que se pruebe su honestidad y ética profesional. No podemos seguir adelante con los jueces que tenemos, que se vende al mejor postor, que cometen mala praxis, que ascienden por el dedo del gobernante de turno y quedan en el puesto eternamente.
La propuesta del COFAVI coincide en un punto con la del Gobierno: llevar a la práctica el juicio por jurado.
Sí, eso es cierto, pero para implementar el juicio por jurado primero hay que educar a los ciudadanos. Si en Estados Unidos donde se practica desde hace años es difícil encontrar un jurado honesto, pensemos en la Argentina donde la gente se vende por cualquier cosa… Por eso, participar de un jurado debe ser considerado una carga pública porque si no se convertiría en un negocio: voy, me anoto y cobro. Primero hay que educar a la población y eso va a llevar tiempo.
Mientras el Gobierno anuncia la incorporación de más policías, patrulleros y tecnología para terminar con la inseguridad, ustedes proponen la participación y el control ciudadano de la policía…
Por un lado, proponemos que los vecinos puedan elegir y controlar a los comisarios por medio de la creación de un comité de seguimiento que, una vez por semana, se reúna con las autoridades y supervise su accionar.
Por otro lado, pedimos la suspensión de los policías con procesos pendientes, su capacitación y humanización, un aumento de sueldo y que, cuando cumplan el horario de servicio dejen el arma en la comisaría. La mayoría de los asesinatos son cometidos por efectivos de civil que ante el miedo a que los delincuentes los reconozcan, ellos sacan el arma, tiran primero y matan a la gente que queda en el medio.
Una de sus propuestas es la creación de un instituto de victimología ¿Cuál sería el objetivo?

El objetivo es agrupar y ayudar a los familiares que sufrieron la pérdida de un hijo pero a nivel nacional porque la vida y la muerte no deben tener fronteras dentro del país. La idea es que los familiares de las víctimas tengan un lugar de contención, puedan contar sus experiencias y seguir adelante entre todos.
¿Cuál es su opinión con relación al fenómeno Blumberg?
Blumberg se ha convertido en un fenómeno usado por diferentes estamentos políticos y económicos y él se está dejando usar. Espero que pronto se dé cuenta. Políl no tiene autoridad moral para venir a decirnos lo que tenemos que hacer y tampoco les puede decir a los políticos qué hacer porque él viene con frases hechas o con cosas mandadas, no salen de su cabeza. Y mientras tanto se olvidó de que le mataron un hijo y no se está ocupando de la causa. ¿Porqué no se habla de Axel? porque el padre ocupa el centro de atención y ahora habla de seguridad, salud y trabajo.
Políl tendría que parar un poco y juntarse con los que comparten el mismo dolor, para que sepa que la violencia social e institucional no empezó cuando mataron a Axel sino que viene de mucho antes.

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Cómo comunicarse:
COFAVI (Comisión de Familiares de Victimas Indefensas). Teléfono: 4292-6107.
Correo electrónico: Cofavi@ derechos.org

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