El entrenador de Lanús, Ramón Cabrero, aseguró hoy que su equipo se apresta a cerrar “un año brillante” y se mostró entusiasmado de cara al futuro inmediato, al considerar que las principales figuras del plantel aún no llegaron a su techo.
Cabrero dijo que si bien muchos de los valores jóvenes de Lanús todavía deben asentarse en la máxima categoría del fútbol nacional, ya le han dado mucho al club, como un subcampeonato local, una destacada campaña en la Copa Sudamericana 2006 y sobre todo un robusto promedio del descenso.
“Justo en el partido contra los jujeños (por Gimnasia y Esgrima de Jujuy) cumplimos un año de gestión con (Luis) Zubeldía y no tengo dudas de que ha sido brillante, por nuestros logros deportivos y porque tenemos un equipo joven ya consolidado en primera división”, comentó el DT.
“Pero creo que todo lo que consiguió este plantel es muy poco comparado con el promedio, porque te da tranquilidad para probar jugadores jóvenes y si perdés un partido no tenés que andar preguntando cómo salió tal o cual rival. Para Lanús, eso es muy importante”, agregó.
En declaraciones a la Agencia Universitaria de Noticias y Opinión, Cabrero reconoció de todos modos que el Torneo Apertura 2006 es un campeonato “raro” para Lanús, que se convirtió en un equipo temible como visitante, pero que jugando en casa apenas sumó un punto en siete presentaciones.
“Cometimos errores y tenemos que asumirlo. Echarle la culpa a la mala suerte nada más sería muy fácil. Empatamos o perdimos partidos en los últimos minutos porque nos equivocamos de rumbo, no acatamos como debíamos ni jugamos con el orden que tenemos nosotros”, señaló.
Lanús es el equipo con peor rendimiento del campeonato jugando como local, con apenas un triunfo, un empate y cinco derrotas en el estadio de Guidi y Arias, donde el próximo sábado recibirá al necesitado Nueva Chicago, tras vencer por 3-1 como visitante a Colón de Santa Fe.
“Tuvimos tres o cuatro partidos en los que no jugamos bien, contra Gimnasia, en Jujuy y con Godoy Cruz. En Santa Fe jugamos un buen partido y ganamos bien. Recuperamos nuestra línea de juego”, destacó en alusión al triunfo ante Colón, por la decimoquinta fecha del certamen.
No obstante, Cabrero subrayó que la eliminación de la Copa Sudamericana caló hondo en el ánimo del plantel e indicó –además– que los equipos jóvenes, como el de Lanús, son proclives a tener vaivenes en su desempeño.
“El jugador joven siente la presión más que ningún otro y esto que sucedió es muy típico de un jugador con pocos partidos en primera división. Eso de que 10 ó 12 partidos son suficientes es mentira, se necesitan por lo menos dos años para consolidarse”, remarcó el entrenador.
De todos modos, afirmó entusiasmado: “Lo bueno (de los futbolistas jóvenes) es que tienen un piso, pero el techo está cada vez más arriba”.
Tras consagrarse subcampeón en el pasado Clausura y llegar a los cuartos de final de la Copa Sudamericana, ahora Lanús apunta a finalizar el certamen doméstico al menos en una quinta ubicación.
“La idea es terminar el campeonato lo mejor posible, pero sin arriesgar el físico de los jugadores, que hicieron un gran desgaste este año. Hay que poner en la cancha a los que están 10 puntos, aunque tengan que quedar afuera jugadores quizá más importantes”, recalcó.
También dijo que la meta es concluir el torneo con 25 ó 26 unidades, y consultado sobre el encuentro ante Nueva Chicago manifestó: “Es un equipo que toma riesgos y que trata de jugar bien y en todos lados igual.”
“Estamos todos muy parejos en el campeonato y depende de lo que haga cada uno. Si nosotros jugamos como lo hicimos ante Colón, vamos a tener muchas posibilidades de ganar, pero si jugamos como frente a Gimnasia de Jujuy es más probable que terminemos perdiendo”, concluyó.
AUNO 13-11-06 VLC-EFR