Piden hacer un lugar social en La Casona

Oscar Castellucci, el padre de Martín, el muchacho que murió tras ser agredido por patovicas en un boliche de Lanús, propuso “hacer un lugar social” en ese local, durante la marcha realizada hoy por familiares y amigos para exigir por el esclarecimiento del crimen.
Bajo el lema “No nos gane la impunidad, ni nos cierren los ojos y para que no nos quieran callar”, los familiares y amigos de Martín Castellucci se juntaron esta tarde frente a la Plaza Congreso, donde reclamaron Justicia.
El joven, estudiante de veterinaria, fue atacado por patovicas el 3 de diciembre pasado en la puerta del boliche La Casona, ubicado en 25 de Mayo 79 de Lanús oeste, que el intendente Manuel Quindimil decretó su cierre y la anulación de la habilitación.
“La clausura definitiva es simbólica y mi sueño sería ahora que se expropie el predio, que sirvió para discriminar y golpear chicos, y se haga un lugar de valor social y reflexión”, expresó Oscar Castellucci.
Al ser consultado por la prensa si su propuesta comprendía la creación de un comedor infantil, el hombre respondió que “eso puede ser”.
Castellucci criticó a la policía que custodiaba el local, al remarcar una declaración que figura en la causa de uno de los policías que estuvo ahí.
“Preguntado porque no tomó otra decisión ante la situación que veía planteada, tuvo una respuesta muy elocuente, dijo: ‘no se me ocurrió’”, señaló Castellucci.
Sobre las declaraciones de los amigos de su hijo, el hombre destacó que “ellos contaron lo que vieron. Si bien el amigo que estaba con él no vio el momento en que lo golpeaban, sino que hay otros testigos de eso, vio como a Martín lo arrastraban para sacarlo del lugar”.
“Como lo dejaban tirado en la calle y, como después, los policias, que se supone debían estar para cuidar la seguridad de los que estaban ahí, lo arrastraron un poco más lejos”, afirmó el padre del chico asesinado.
Oscar Castellucci, profesor de historia en la Universidad de La Plata y un reconocido intelectal del peronismo, agradeció la presencia de familiares y amigos en la marcha al expresar que “es lo único que me mantiene en pie”.
“Yo, verdaderamente, no tengo ninguna fuerza, en absoluto, no estoy entero ni nada que se parezca, pero todo este apoyo que he recibido de gente, de conocidos, gente que me escribe, que me conocía de chico”, agregó.
Finalmente, contó que entre los asistentes hay “una mujer que recuerda que jugábamos cuando éramos chicos, y ahora la vida nos une en esto, porque es mamá de uno de los chicos que murió en Cromañón”.
Luego de la golpiza recibida, el muchacho fue abandonado a metros del boliche y, posteriormente, llevado por sus amigos a un centro asistencial local.
Tras recibir las primeras atenciones en el Hospital Vecinal de Lanús, Castellucci fue internado en el Instituto del Diagnóstico porteño, donde murió el jueves 7, como consecuencia de los golpes recibidos.
La Justicia detuvo ese mismo día a José Segundo Linqueo Catalán, de 28 años, y a Jorge Romano, de 47, quienes figuraban como empleados de seguridad del boliche, pero este último fue excarcelado por la Justicia de Lomas de Zamora.