Lomas de Zamora, junio 21 (AUNO).- El partido que jugará Banfield ante Colón, el domingo a partir de las 15, en el Florencio Sola, será un choque trascendental para definir el futuro del club del Sur del GBA en Primera División. El inoxidable Esteban Fuertes, a 90 minutos de su retiro, calentó la previa con el recuerdo de una final por el ascenso en la que el ‘Taladro’ superó al ‘Sabalero’ hace ya 19 años.
Corría el año 1993. Banfield disputaba el viejo Nacional B y se había preparado para lograr el ansiado ascenso a Primera. Los dirigidos en ese entonces por Carlos Babington habían sumado a sus filas a Gabriel Puentedura, Héctor Herrero, Gustavo Maciel, Gabriel Lengüita, Jorge Higuaín, Adrián Czornomaz, Jorge Ortega e Ivar Stafuza. Además, contaban con hombres de la casa como Jorge ‘Patrulla Jiménez, Daniel ‘Chueco’ Delfino, Raúl Wensel, Juan Carlos Roldán y un joven Javier Sanguinetti haciendo sus primeras apariciones.
El equipo mantuvo un buen nivel durante todo el certamen, sobre todo en la primera rueda, en la que pudo sacar las mayores ventajas. Ya en la segunda parte, Colón de Santa Fe se le acercó y luchó palmo a palmo por la punta de la tabla. Ambos compartieron el primer puesto con 56 puntos y debieron jugar una final para determinar quién ascendería a la máxima categoría del fútbol argentino.
El encuentro se disputó el 26 de junio en el estadio Chateau Carreras (hoy Mario Alberto Kempes) de Córdoba. Fue empate 0-0 y se definió por penales. En la serie inicial, Colón llevaba las de ganar porque tenía dos goles de ventaja. Sin embargo, Puentedura se convirtió en el héroe de la tarde al atajar las últimas dos ejecuciones y darle a Banfield una nueva oportunidad en la serie de uno.
Por el lado del conjunto albiverde fue Javier Sanguinetti el último en patear y convertir su penal. Llegó el turno de Colón a través de Roberto Mamani, que erró su disparo estrellando la pelota en el palo. Banfield ganó 5-4, se coronó campeón y ascendió.
Hay que viajar 19 años atrás para llegar a esa final de la que habló Esteban Fuertes. Esa de la que quiere tomar revancha el domingo ante Banfield en su último partido como profesional. Justamente en el día en que el ‘Taladro’ puede perder la categoría o caer por primera vez en Promoción.
En aquel entonces, el ‘Bichi’ Fuertes jugaba para El Porvenir. Luego pasaría por Los Andes y recién llegaría a Colón en 1997. Para atenuar la anacronía de esta supuesta venganza hay que decir que muchos de los jóvenes que hoy defienden la camiseta verde y blanca tenían en esa época apenas uno o dos años de vida. Igual que muchos de los que juegan en Colón.
En el partido en que se despidió del público ‘sabalero’ en el estadio Brigadier López, luego de convertirle dos goles a Godoy Cruz, Fuertes manifestó: “Tenemos una revancha pendiente con ese equipo, Quiero jugar y ganar. Sé que la gente quiere que ganemos el próximo partbido”.
Las palabras retumbaron en la zona Sur del GBA y el entrenador Eduardo Acevedo respondió: “A la gente de Banfield no le gusta lo que declaró, se ve que le quiere poner un condimento más al partido. A mi me tocó el orgullo y eso que yo no sé la historia de la que habla, en la cancha se verá”.
Si bien Fuertes salió a bajarle los decibeles a sus palabras y aclaró que no tiene nada en contra de Banfield, al argumentar que simplemente quiere ganar el partido y si es posible convertir un gol, las sospechas surgieron en forma espontánea.
¿Para qué dijo Fuertes lo que dijo? ¿Qué está tratando de justificar? Eso lo sabrá sólo él y aunque generó suspicacias hay un solo hecho concreto. Banfield debe salir a ganar. No por el pasado, sino por el presente y el futuro. Sin importar los viejos rencores que Colón viene alimentando hace años, más allá de que el tema jamás se habló durante los últimos diez años de enfrentamientos ininterrumpidos.
AUNO 21-06-12
FT-MFV
