La modificación de 2011 a la Ley de Concursos y Quiebras contempla al trabajador. En el estatuto anterior el concurso preventivo ignoraba a los obreros, pieza fundamental de la empresa. El comité de acreedores estaba formado por aquellos de mayor monto que casi siempre eran bancos. Se le daba prioridad a un banco, que si pierde su crédito a lo sumo pierde un negocio, y no a los trabajadores, para quienes perder un trabajo es no llevar el pan a casa.
A partir de esta modificación los trabajadores pueden opinar sobre la marcha del proceso y revisar los legajos de los créditos para comprobar que los dueños no están haciendo una quiebra fraudulenta.