Lomas de Zamora, abril 15 (AUNO).- Familiares de un joven de Monte Grande que murió en un accidente entre dos colectivos el 10 de marzo pasado piden que quienes hayan visto el choque “se pongan una mano en el corazón” y declaren como testigos en la causa que por la que está imputado un chofer de la línea 518.
“A la gente que haya visto algo les pedimos que acudan a lo más profundo de su corazón y que si tienen alguna información de lo que pasó se comuniquen con nosotros”, manifestó Fabián Jimenez, padre de la víctima.
Su hijo, Franco Jimenez, de 19 años, volvía a su casa en Monte Grande por la ruta 205 después de dejar a su novia en la localidad de Tristán Suárez, cuando a poco de salir de la casa de ella “un 518 que estaba detenido en una esquina quiso doblar”, relató el hombre.
“Cuando mi hijo estaba cruzando, lo tocó de atrás, salió despedido y fue atropellado por otra unidad de la misma línea, que venía en sentido contrario”, precisó.
El accidente ocurrió pasadas las 18 en la esquina de Las Margaritas y la Ruta Provincial 205, Tristán Suárez, una zona que el padre del chico caracterizó como “poco transitada por peatones los domingos, pero sí por automovilistas”.
El hombre aseguró que “algunas personas llamaron para dar información o para ofrecerse como testigos, pero después no se volvieron a comunicar”.
Además destacó que le dijeron que “el colectivo que atropelló a Franco venía lleno”, por lo que “si alguno de los pasajeros se acerca a declarar, se le va a agradecer muchísimo”.
Por la muerte del joven, que era jugador del Monte Grande Rugby Club, está imputado el chofer del colectivo que lo atropelló y la investigación está a cargo de la Unidad Fiscal de Instrucción 2, de Ezeiza.
JR-AFD
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