Tras ser aprobado en Diputados, la voluntaria de Mamá Cultiva Argentina, Julieta Molina, celebró que el proyecto se haya convertido en ley y lo calificó como un “hecho histórico” . Pero advirtió la necesidad de poner en debate la despenalización de la tenencia.
En el marco de la sanción de un marco regulatorio para el cannabis medicinal y cáñamo industrial, la voluntaria de Mamá Cultiva Argentina, Julieta Molina, celebró que el proyecto se haya convertido en ley al calificarlo como un “hecho histórico” y planteó que se trata de una “instancia superadora hacia la reglamentación de todos los usos del cannabis”.
“Es un hecho histórico porque entendemos esta ley como una instancia superadora hacia la reglamentación de todos los usos del cannabis”, señaló en diálogo con Hecho en Casa, el programa de radio de AUNO en Radio Conurbana.
En ese sentido, reconoció que todavía” falta mucho” al ser necesario que “se ponga sobre la mesa la despenalización de la tenencia”. También reclamó que “se tienen que aplicar políticas públicas y de salud que apunten a ampliar el espectro de mediques que se interioricen sobre el uso del cannabis”. “Hay mucho desconocimiento en la comunidad médica y científica sobre su uso”, expresó Molina.
Sobre el proyecto aprobado en Diputados, indicó que viene a complementar la Ley 23.750, que autoriza el uso terapéutico y paliativo del cannabis. También destacó que fue “un logro que se logre ampliar el espectro a un montón de otras dolencias y afecciones”.
La iniciativa que obtuvo 155 votos afirmativos apunta a brindar un marco regulatorio para la inversión pública y privada en toda la cadena del cannabis medicinal y complementar la actual legislación, la Ley 27.350, que autoriza el uso terapéutico y paliativo del cannabis. En el caso del cáñamo industrial, apunta a legalizar los eslabones productivos, los de comercialización y sus subproductos.
