Las derrotas en el ámbito deportivo suman cierto aire de frustración. Suele suceder que el rendimiento no es el mejor. Algo que complota para que los resultados sean negativos. Con ese panorama, los jugadores salen a decir que es preciso trabajar mucho más fuerte. Que es necesario no perder la concentración.
Las líneas anteriores podrían haber sido parte de la crónica sobre la realidad del básquet en Lanús. Pero es simple potencial anulado, porque pese a la caída como local ante Gimnasia de Comodoro Rivadavia por 77- 67, el “Granate” se clasificó por primera vez en su historia para disputar el Súper 8.
Es que la victoria de Obras Sanitarias sobre Weber Bahía Estudiantes por 85-69 le dio el pase directo al campeonato que reúne a los mejores equipos de la temporada.
“Es un logro que venimos buscando hace tiempo. Fuimos muy superiores a muchos rivales a lo largo de este semestre y supimos hacer las cosas bien como para ahora tener la chance de afrontar un torneo de esta calidad. Hay que disfrutarlo y seguir demostrando la fortaleza de este plantel”, aseguró el entrenador de Lanús, Silvio Santander, en diálogo con AUNO.
Lanús marcha tercero en la zona Sur de la Liga Nacional con 21 puntos y ya obtuvo su lugar entre los ocho equipos que definirán el certamen en Formosa, entre el 16 y el 19 de diciembre. Ya hay tres clasificados: además del “Grana” y son Peñarol de Mar del Plata –campeón del Super 8 en 2009- y Obras.
“Va a ser un campeonato muy complicado en el que tenemos que salir a jugar como sabemos hacerlo. El equipo fue mejorando con el correr de los partidos y se motiva en estas instancias. Por eso tengo confianza en que podemos realizar un buen papel”, afirmó el DT.
La campaña del elenco del Sur del Conurbano bonaerense consta de ocho victorias y cinco derrotas, luego de trece jornadas disputadas. Y mediante un andar regular, especialmente en el comienzo de la Liga, supo cosechar seis triunfos consecutivos en las primeras siete fechas.
“Arrancamos con un muy buen envión y eso que nos permitió afirmarnos en la zona. Logramos excelentes resultados y por eso esta realidad. Ahora, hay que continuar de la misma manera sin perder esa fuerza”, analizó.
Un triunfo y el salto de calidad
Quizá la victoria más notoria fue ante Peñarol, de visitante. Campeón vigente, y que acumulaba 44 partidos sin conocer la derrota, el equipo de Sergio Hernández superaba con facilidad a todos sus rivales, hasta que Lanús se le plantó enfrente y lo venció 73-64. Corría la sexta fecha. Hoy, el plantel marplatense registra un record de 12 triunfos y apenas una caída.
“Fuimos superiores y manejamos los tiempos con inteligencia. Peñarol es un gran equipo, el mejor de Argentina. Y fue una enorme sorpresa superarlo. Lanús tiene cualidades y en ese partido nos salieron las cosas. Si nos toca enfrentarlos nuevamente en el Super 8, esperemos que se repita la historia”, enfatizó Santander.
Con un elenco renovado entre la juventud y la experiencia de algunos pilares como Lucas Victoriano, el “Granate” se encuentra en pleno ascenso. Y los resultados se observan desde el año pasado.
El equipo finalizó octavo y por primera vez había logrado un lugar en los play-off. Lejos de amilanarse, la temporada 2009-10 fue de menor a mayor. Con un comienzo sumergido en dudas, las victorias recién llegaron sobre el final y consiguió el pase a la definición mano a mano desde la reclasificación. Se enfrentó, justamente, a Peñarol. Y perdió fácil. Pero ahora las cosas son diferentes.
El segundo semestre de 2010 muestra un Lanús en alza, confiado de sus condiciones y con intenciones de pegar el salto que lo catapulte a dar pelea en la Liga Nacional. El “Grana” quiere ser protagonista. Y así lo hace saber el propio entrenador.
“Somos un plantel que comprende lo que quiere. Ordenado, con ganas y mucho entusiasmo para seguir demostrando un enorme rendimiento. Estamos en pleno crecimiento y no hay que dejarse asustar cuando se está en lo más alto. Es el desafío: entender que podemos pelear y no caernos en lo que resta de la temporada”, remarcó.
Y continuó: “Para eso será importante el aporte de las figuras como Victoriano o Gabriel Fernández, que vienen con una trayectoria en el extranjero y la Selección, y siempre pueden ayudar a que los más jóvenes se encarrilen y le den al club enormes satisfacciones. En ese camino estamos”.
En el horizonte está el Super 8. Pero más allá se extienden las fronteras. El campeón del certamen se clasificará directamente a la Liga Sudamericana del próximo año. Algo que, si bien es difícil, significaría un salto de calidad por parte del conjunto de la Zona Sur del GBA.
“Es una chance única que cada jugador debe tomar con la seriedad necesaria. El torneo es muy corto y hay que aprovechar el tiempo. Depende de nosotros. Pero esta clasificación es una muestra de lo que venimos haciendo durante varias temporadas. Y no queda solamente acá”, remarcó Santander.
Lanús perdió pero ganó un lugar en el campeonato que cerrará el año. A veces las derrotas en el ámbito deportivo suman cierto aire de gloria. Suele suceder que el rendimiento no es el mejor, pero algo complota para que los resultados negativos sean positivos.
Con ese panorama, los jugadores salen a decir que se tuvo una cuota de suerte que siempre es necesaria tener de su lado. Al fin y al cabo, lo que digan las crónicas posteriores poco importan cuando se consiguen estos logros por primera vez en la historia. Lanús tiene otros objetivos en mente a partir de ahora, más allá de lo que digan estas líneas.
AUNO-02-12-10
MRQ-LDC