La comunidad educativa del colegio Westminster de la localidad de Banfield realizará una jornada artística en la institución este sábado a la tarde para homenajear al ex profesor y artista plástico Roberto Cortés tras su fallecimiento en junio de este año.
Su paso por las aulas dejó una huella en camadas de alumnos, quienes se organizaron al enterarse de su muerte para rendirle homenaje, primero con un mural colaborativo y luego, con una jornada que estará plagada de arte y música.
Una de las organizadoras del evento Carla Castro habló con AUNO y reveló cómo nació el proyecto: “Un ex alumno se comunicó con una de mis mejores amigas y le acercó la propuesta de primero hacer un mural en conjunto. Mi amiga me llamó, me preguntó y me pareció una idea hermosa. Después, nos pusimos a pensar mejor y llegamos a la conclusión de que el mejor lugar para ponerlo de manifiesto era el colegio”.
Ante eso, las autoridades escolares se mostraron predispuestas para llevar adelante la iniciativa. “Convocamos una reunión con las autoridades del colegio para llevar una idea preliminar y la directora se emocionó mucho porque él fue profesor durante muchos años ahí, marcó a muchos. Así que cuando lo planteamos, se nos abrieron las puertas inmediatamente”, expresó la organizadora.
Por su parte, Joaquín Cortés, uno de los hijos de Roberto, dialogó con AUNO y manifestó que cuando se contactaron desde el grupo de exalumnas y exalumnos con su familia, se emocionaron “muchísimo” y los “llenó de alegría” así como también de orgullo. ”Consideramos que lo merece y que a él le hubiese divertido muchísimo. Quienes lo conocieron saben bien que disfrutaba mucho todo festejo o evento cultural, y si él estaba involucrado lo disfrutaba mucho más, como un nene en su cumple”, señaló.
En cuanto al mural, ya está pintado en el colegio, pero este sábado se culminará en vivo con los detalles finales. El diseño está inspirado en las obras de Cortés y en todas las enseñanzas de los que pasaron por su aula. “El primer boceto tomó como base algunas obras de Roberto, las cuales tienen como escenario el barrio y una técnica que él utilizaba mucho y que siempre nos insistía en las clases: el punto de fuga. También reflejamos colores vivos y una frase que enmarca todo este homenaje. Obviamente que después fuimos modificando cosas en el proceso”, explicó Castro.
El arte es la vida cotidiana. Una frase dicha por el propio Cortés en una entrevista y que expresa su manera de entender a la vida y el arte. Así lo relató una ex alumna del colegio Westminster Stefanía Sagula para AUNO, sobre cómo eran las clases con el difunto profesor de arte. «Era un profesor muy didáctico. Te enseñaba a crear o recrear cosas de la vida cotidiana con materiales que cualquiera podía tener desde papel picado hasta una plasticola. Me acuerdo hasta el día de hoy una técnica que nos enseñaba mucho que era la del vitral”, recordó.
En esa línea, demostró su admiración por ese artista que creaba grandes cosas con sus manos: “Él con una tiza hacía magia en el pizarrón y uno se preguntaba cómo hizo cuando algunos no lo podíamos hacer ni con lápiz».
«Me acuerdo que la última escenografía que realizó mientras fue profesor -Roberto hacía las escenografías para todas las obras institucionales del colegio- la hizo con afiches. Así era. Con una tiza te hacía un mural que no podías creer y una escenografía con afiches, a la altura de cualquier obra profesional”, sostuvo la ex alumna.
El artista plástico argentino y del conurbano bonaerense -así se definía- era oriundo de Llavallol donde vivió junto a su esposa Marita Sario y sus hijos Joaquín y Tobías Cortés. Supo ser profesor de arte en varios colegios de zona sur, como el Colegio José Mármol, Modelo Lomas, Modelo Banfield y Colegio Westminster.
“Lo más destacable es que era un tipo que cuando hacía lo que le gustaba y lo estaba sintiendo brillaba, literalmente, emitía una luz que saturaba los colores de todo lo que le rodeaba, de la misma manera que se ve en sus cuadros”, enfatizó Joaquín.
En ese sentido, opinó que “evidentemente cuando enseñaba, también brillaba, y contagiaba esa energía a quienes lo escuchaban”. “Era un apasionado del arte (en todas sus variantes), de la libertad y del sentimiento, y despertar esas pasiones le hacía muy bien”, aseguró el hijo de Cortés.
Sus cuadros plasmaban su mirada sobre el mundo e incluían personajes célebres desde Juan Domingo Perón, Moria Casán, «El Flaco» Spinetta, Julio Cortázar, el Gauchito Gil, hasta a sí mismo, su pareja Marita, sus hijos y sus amistades.
Consultado por las tantas obras de su papá, Joaquín reveló que su favorita es «La Libertad» porque refleja que “para conseguir un mundo más justo y bello hay que pelear por ello, y para esto es necesaria la participación de todes, saltando las banderas que a veces nos dividen en conflictos irrelevantes”.
La jornada del próximo sábado está abierta al público y será desde las 15 hasta las 18 horas. Se podrá realizar un recorrido por algunas obras de Roberto Cortés así como también el mural pintado en vivo por alumnos y exalumnos. A su vez, tocará una banda y habrá algunas palabras por parte de la comunidad educativa del Westminster.
“Es impresionante lo que está sucediendo en términos de convocatoria. Mucha gente que se enteró de esta movida, está emocionada y viene este sábado”, reveló Carla Castro.
Por su parte, el hijo de Cortés expresó: “Creo que cuando nos deja un ser querido, y sobre todo tan cercano como tu papá, uno piensa que el dolor y la desolación es algo muy propio y muy interno del círculo más cercano, pero esta iniciativa de sus exalumnes nos hace ver lo que su vida significó para muchísimas personas”.
En pocas palabras no se puede resumir lo que significó Cortés para sus alumnos y su familia pero al intentarlo, coincidieron en que era una persona mágica, que salía de lo convencional para convertirse en alguien extraordinario. Su capacidad de poder plasmar en un lienzo un sin fin de ideas es admirada también. No sólo fue profesor sino un artista que expusó la vida cotidiana a la vista de todos.
AUNO-15-10-21
DL-SAM