Un día caluroso de diciembre y yo que decido visitar el cementerio municipal de Avellaneda. Un señor mayor está parado justo en frente a una plaza donde hay una piedra blanca que simboliza la tumba de Luca Prodan. “Luca vive”, dice una pintada sobre la roca.
El cuerpo de Luca no descansa abajo de esa piedra, pero a los fanáticos no les importa. La piedra, que fue traída desde Córdoba, se convirtió en un altar del líder de Sumo, que murió el 22 de diciembre de 1987. Rosarios, flores artificiales, pulseritas de macramé y una botella de ginebra son algunos de los objetos que la adornan. También, varias crucen hechas con pedazos irregulares de madera y un cuadro en blanco y negro de la cara del artista.
“Gracias Luca por venir a hacer tu música en Argentina”, dice en liquid paper. En la parte superior de la piedra, hay una escultura de la cabeza de Luca. Para que no sufra el frío, la abrigaron con un gorro de lana verde. Del cuello cuelgan remeras de Sumo.
El señor que está frente a la plaza me cuenta orgulloso que es cuidador del cementerio hace muchos años. En cuanto a los restos de “Lucas Prudan”, como lo llama él, me explica que tuvieron que ser sacados de la tumba común en la que se encontraban por el comportamiento de algunos fanáticos que iban a verlo.
“Escribían cosas malas, de gusto muy feo, en las tumbas de alrededor. A veces venía la policía a sacarlos porque estaban tomados o se quedaban hasta muy tarde”, cuenta Néstor.
Pero los fans no fueron los únicos que visitaron el cementerio: “Venía mucho ‘Pity’ Álvarez. Traía equipos, consolas y unas conservadoras, y se quedaba todo el día. La última vez que lo vi, vino con Charly García, (Roberto) Pettinato y Pipo Cipolatti. Ese día se les perdió Charly, que se les fue a un boliche de por acá”, dice otro de los cuidadores.
Pity con sus compañeros de Viejas Locas, en el cementerio
Las numerosas visitas que recibe el “altar” de Luca Prodan se convierten en anécdotas que los trabajadores del cementerio cuentan con entusiasmo. Es algo que rompe con la solemnidad del lugar. Los jóvenes almuerzan, tocan la guitarra y toman unas cervezas. Como si fuera un parque.
El lugar también es una atracción para los extranjeros: australianos, chilenos y europeos pasaron por el cementerio donde también descansan el líder de Flema, Ricardo Espinosa, y el fotógrafo José Luis Cabezas.
UN ENTIERRO QUE SE
HIZO MUY TEMPRANO
El cuerpo de Luca iba a ser enterrado en el cementerio de Chacarita, pero por un problema legal no se pudo, y finalmente terminó en Avellaneda. Su hermano, Andrea, contó en el documental Juntos que cuando se enteró de la muerte de Luca viajó desde Europa hasta Argentina. Cuando llegó, el funeral ya había terminado. El gobierno de Raúl Alfonsín había decidido hacer la ceremonia temprano porque, según Andrea, “no quería jóvenes reunidos en masa en un mismo lugar”. Andrea vio después por televisión las imágenes del entierro de su hermano.
El funeral de Luca en el documental “Juntos”, de Jannik Splidsboel (2008)
Roberto Pettinato fue quien se encargó de hacer los trámites para que los restos de Luca fueran levantados, luego de las quejas. El cuerpo fue cremado y Andrea se las llevó a Europa.
Pero el cementerio de Avellaneda sigue siendo un punto de encuentro para los seguidores: los 22 de diciembre, el aniversario de la muerte, los fanáticos se reúnen a cantar las canciones de Sumo hasta que los trabajadores del lugar,o la Policía, se lo permiten.
walter dice:
segun un tweet reciente de Andrea las cenizas quedaron debajo de la piedra de común acuerdo entre la familia y las autoridades del cementerio.
Andrea Prodan
hace aproximadamente 2 años
A propósito de los restos de Luca, en Avellaneda:
Me han dicho que los ‘cuidadadores’ dicen, a veces, que mi hermano no está más ahí. Yo sopecho q es porqué están hartos de limpiar… de contestar a preguntas…de qué se yó…. El mismo director del Cementerio me suplicó de dejarlo a Luca ahí cuando lo tuvieron q mudar al nuevo sitio (adentro del predio)…a mitades de los ’90. Del resto en Nono, en esta época, no lo querían, para evitar molestias. Reitero: entre mi familia y el Directivo de Avellaneda se tomó la decisión DEFINITIVA de dejar las cenizas ABAJO DE LA PIEDRA. Yo sigo firme con la idea q Luca es del pueblo y que éste ya es SU LUGAR.
GRACIAS.