Lomas de Zamora, may 10 (AUNO) – La ruptura de los viejos paradigmas de enseñanza, concebir la inteligencia desde múltiples planos y destacar la situación emocional del niño como factor importante en su adaptación en la cotidianeidad fueron los principales ejes del encuentro ‘Piedra Libre para las Altas Capacidades’ realizado en la Municipalidad de Lomas de Zamora
La jornada fue organizada por la Subsecretaria de Educación del municipio y el Servicio Interdisciplinario de Asistencia de Educación (Siade), que convocaron a la Institución Argentina de Altas Capacidades y Superdotación para exponer sobre el tema.
En la ocasión se explicó que “los niños de hoy presentan un nuevo desafío a los docentes, directivos y profesionales debido a las diferentes estigmatizaciones y encasillamientos a los que son sometidos al salir de la homogeneidad y la norma establecida, que provoca que se coloquen en un lugar de vulnerabilidad”.
Al respecto, la directora de ese instituto, Ivone de Lorenzi, explicó que “se plantea que un chico con altas capacidades es un recurso humano; es una persona que puede darle mucho a la comunidad”.
Ratificó que “para que esto no se convierta en un fenómeno ni en algo de exhibición se debe cuidar la parte emocional y social para que a través de una inteligencia cooperativa se desarrolle de una manera sana y hacer cultura juntos”.
El motivo principal que impulsó la convocatoria de ese debate fue el diagnóstico según el cual “se habla muy poco en las escuelas y centros de formación sobre los niños con altas capacidades” y que además “se tiende a definir al niño desde sus déficit y posibles trastornos y no desde sus fortalezas y potencialidades”, según se explicó.
En el debate se habló sobre la diferencia entre niño precoz, prodigio, talentoso, superdotado y genio, respectivamente.
Sobre el niño precoz se dijo que es aquel que tiene un desarrollo temprano en un área determinada, pero no lo mantiene posteriormente, mientras que el prodigio sobresale en algún tipo de talento en un campo específico y que es fuera de lo común para su edad.
Por su parte, el niño talentoso es el que posee una aptitud de muy alto nivel en un área determinada; el superdotado, presenta un nivel de rendimiento intelectual superior en una amplia gama de aptitudes y capacidades; y el genio es quien dentro de la superdotación y su compromiso por la tarea logra una obra genial.
En el encuentro se definió también el término ‘inteligencia’ como una aptitud integrada: “Antes se encontraba en lo cuantitativo, en la inteligencia lógica, verbal o matemática. Pero también se debe hablar de inteligencias múltiples como las artes, la música”, precisó De Lorenzi.
“Distintos teóricos de la cognición fueron desarrollando esta dualidad para poder llegar a una combinación e ambos. Todos tenemos un potencial pero va depender del ambiente y de la motivación con la que se cuenta. Y si uno no es estimulado puede desconocerlo o hasta incluso perderlo por la falta de entrenamiento”, aseguró esa especialista.
También especificó sobre el nuevo papel que deben tener los docentes en el aula y habló sobre ciertas metodologías que “ponen al docente en un lugar, que es estar dispuesto a aprender y a no tener la respuesta permanente, que se pueda sorprender y descubrir. No tratar de tener siempre una posición dominante o estar a la defensiva”.
Con un público mayoritariamente femenino y con un papel en el ámbito escolar, psicológico o pedagógico se debatió sobre el acompañamiento de los establecimientos escolares y de la familia cuando se presenta un chico con Altas Capacidades o Trastornos de Aprendizaje.
El niño que tiene trastorno de aprendizaje es el que presenta habilidad en un área específica y presenta dificultad en el desarrollo de otras áreas.
“Estos niños se sienten fuera de sí mismo y no saben como dominarlo. Se frustran. Son capaces de hacer cosas muy bien, y otras, mal y no lo entienden y no pueden manejarlo. Entonces, nos apoyamos más en aquella discapacidad, en aquello que no puede hacer y dejamos de ver la posibilidad de aprender”, explico la psicóloga Nora Giberti.
“Las principales características de aquellos niños son: problemas de atención, dificultad para leer, para escribir, trastorno de la alimentación, problemas de conducta, impulsividad, entre otras” amplio Giberti.
Por otra parte, durante la conferencia se realizaron proyecciones para que el público entendiese con facilidad la temática y se citaron mitos filosóficos antiguos (Alegoría de la Caverna y Edipo) y modernos (Superman, El Señor de los Anillos) junto con la problemática que sufren los chicos con altas capacidades, de la mano de Elena Cáceres profesora de filosofía y psicología.
Ocurre que cada año el Siade organiza cinco jornadas y en esta ocasión decidieron abordar el tema de las altas capacidades.
La coordinadora, Graciela Alderete, explicó a AUNO que “nos pareció un tema novedoso y al municipio le interesa abrir nuevas miradas que perfeccionen a los docentes y capaciten a la comunidad educativa lomense. No tomar al niño superdotado como beneficio de la sociedad sino incluirlo en la sociedad.”
Inteligencia emocional
Uno de los tópicos tratados durante la jornada fue la inteligencia emocional, definida como la habilidad para percibir y expresar de manera justa nuestras propias emociones, percibir las de otros y ampliar nuestra sensibilidad a fin de motivarnos y planificar nuestra vida.
La encargada de profundizar ese tema fue la psicóloga Adriana Waiter que afirmó que “este tipo de inteligencia nos ayuda a adaptarnos e influye en nuestra vida un ochenta por ciento, más que el coeficiente intelectual, que influye un veinte por ciento”.
Las características principales son: capacidad de motivarnos a nosotros mismos, perseverar a pesar de las frustraciones, control de los impulsos, regulación de los estados de ánimos y la capacidad de empatizar.
AUNO 10-05-13
MM-HRC