(AUNO/Ciencia) Alrededor de 20 productores agropecuarios de Santa Fe, nucleados en la Federación Agraria Argentina, son los primeros beneficiarios del proyecto BIOFAA, que les permitirá proveerse del combustible que utilizan para trabajar en sus sembrados a partir del cultivo de colza en el 10 por ciento de la extensión de su campo.
La colza es un vegetal oleaginoso que se cosecha en invierno, cuando la tierra se halla desocupada, y representa un excelente rastrojo para la posterior producción de soja y maíz, que son las especies habituales de esa zona.
La planta de biodiesel, inaugurada en junio, “está en condiciones de procesar 4000 litros de biocombustible diarios durante 125 jornadas al año, pero por ahora se encuentra inactiva hasta que los productores destinen sus cosechas de colza para su transformación en combustible vegetal”, explicó a AUNO el responsable del proyecto, Marcelo Rasetto.
Es que, de acuerdo con los precios actuales, la producción de biodiesel representaría un ahorro de sólo 15 centavos por litro, en comparación con el gasoil, lo que por el momento resulta “poco atractivo” para los productores, estimó Rasetto.
De todas maneras, los promotores del proyecto apuestan a otras ventajas, como la obtención para el emprendimiento de los Bonos de Carbono y la venta del glicerol y el expeler, subproductos del proceso de transformación del aceite en combustible.
Los denominados Bonos de Carbono, que se obtendrían por la producción de biodiesel y la consecuente reducción de emisión dióxido de carbono, se podrían vender a las empresas que deben reducir sus niveles de emisión de gases de efecto invernadero, para cumplir con el Protocolo de Kyoto.
En cuanto al glicerol, se podrían producir hasta 200 kilos por cada 1000 kilos de aceite. “Puede ser refinado para venderlo en el mercado internacional como glicerol técnico o, con una posterior destilación, como glicerol medicinal”, explicó Rasetto.
Con respecto al expeler, es una harina de excelentes propiedades proteicas que se utiliza para reforzar la alimentación del ganado.
La construcción de la planta, situada en el departamento de Iriondo, a 45 kilómetros de Rosario, representó una inversión de alrededor de medio millón de pesos que aportó la Secretaría de Ciencia y Técnica de la Nación y se llevó a cabo mediante convenios con la Universidad Tecnológica Nacional de Villa María y la empresa metalúrgica Imegen, de la localidad de Tancacha, Córdoba.
El cultivo de colza puede ser útil además para la producción de aceite. “El aceite de colza está muy difundido en Canadá y en Europa, por sus propiedades alimenticias y su baja acidez, para la dieta humana”, destaca el ingeniero Alejandro Suárez Orozco en el sitio Colza 00.
03.07.07 AUNO GRB/ EV