El Instituto de Microbiología y Zoología Agrícola perteneciente al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) desarrolló un producto capaz de eliminar las larvas del mosquito que transmite el virus del dengue, sin contaminar el medioambiente, en el marco de una epidemia que ya superó los 40 mil casos en nuestro país.
Se trata de un biolarvicida que se aplica en grandes cuerpos de agua como en lagos, lagunas, ríos y arroyos, y tiene la particularidad de matar solamente a las larvas del mosquito Aedes Aegypti, sin ser tóxico para los animales y otros insectos que componen el ecosistema en donde este producto es introducido. Actualmente la sustancia se encuentra disponible para su producción industrial.
El proyecto del biolarvicida comenzó en 2009, mediante las investigaciones realizadas con bacterias de origen natural, a cargo de la ex jefa del laboratorio de Insumos Bacterianos del INTA de Castelar, Graciela Benintende, junto a los becarios Rodrigo Monella y Diego Sauka. Durante estos años, el instituto ha desarrollado otros bioinsumos como biofertilizantes, biofungicidas y bioinsecticidas destinados al control de diversos tipos de plagas que pueden provocar epidemias.
Diego Sauka, actualmente responsable del laboratorio de Insumos Bacterianos e investigador del INTA y del Conicet, explicó a AUNO que la sustancia que produjeron es un “insecticida biológico” que en su formulación tiene una bacteria conocida como Bacillus thuringiensis israelensis que se caracteriza por ser “tóxica exclusivamente para larvas de mosquitos”. A pesar de no ser un componente que afecte a los mosquitos adultos, esta sustancia fue «comprobada con éxito» en situaciones de simulación de campo para eliminar las larvas el Aedes Aegypti.
Sauka señaló que la novedad de este insecticida radica en que fue realizado con “los protocolos de producción e industria nacional” y con la utilización de “insumos económicos disponibles localmente”, para que de esta forma, se pueda lograr un producto “tan o más eficaz” que otros “similares de importación” disponibles en el mercado.
Si bien esta formulación es completamente eficaz para eliminar las larvas del mosquito, Sauka aseguró que este biolarvicida “no va a solucionar” por sí solo el tema del dengue, sino que “es una herramienta más, que está disponible para ser incluida en el programa de control del dengue. “Todo esto debe ir acompañado con la educación en la población y con el ya conocido descacharreo de recipientes que acumulen agua”, advirtió el bioquímico.
En lo que respecta a los organismos que aplicarían el producto, desde el INTA afirmaron que esta institución tiene disponible la tecnología para licenciarla a aquellas entidades públicas o privadas que lo quieran producir y comercializar.
“Hemos apuntado a que municipios y gobernaciones lo utilicen”, aseguró Sauka, pero la idea es “aplicarlo en grandes cuerpos de agua que no podamos eliminar, en donde está presente la larva del mosquito y, así, controlar al vector”.
La aplicación de esta sustancia en el agua debe hacerse en condiciones soleadas o parcialmente soleadas cada 14 días, según indicaron desde los expertos. “El producto desde el punto de vista medioambiental es beneficioso y se va degradando por la luz solar en dos semanas. En lugares en donde no ha habido exposición solar, el biolarvicida puede ser efectivo hasta por un mes luego de su aplicación”, detalló el bioquímico del Conicet.
En representación del INTA, el también doctor en Microbiología manifestó que, con la elaboración de este insecticida contra el mosquito del dengue, queda visible que “las capacidades del INTA van más allá del sector agropecuario”, por el cual se caracteriza el instituto. “Con el desarrollo de este biolarvicida queda comprobado el compromiso que asumimos con la salud pública”, concluyó Sauka.
AUNO-4-6-20
ADR-SAM
Lucas dice:
Hola.. donde consigo este producto?