Lomas de Zamora, agosto 8 (AUNO).- El segundo sospechoso por el crimen de Anahí Benitez, la adolescente de 16 años que apareció muerta el viernes en la reserva de Santa Catalina, declaraba esta noche en los tribunales de Lomas de Zamora en tanto que el profesor de matemáticas detenido por el crimen recuperó su libertad aunque seguirá vinculado a la causa.
Los docentes de la Escuela Normal Superior Antonio Mentruyt (Ensam) de Banfield, a la que asistía Anahí, cuestionaron en una carta el accionar policial y judicial en la búsqueda de la joven, y exigieron “justicia, no chivos expiatorios”.
“Se dice que la justicia y la policía actuaron bien; si fuera así, Anahí hubiera sido rescatada con vida. ¿Por qué se centró la búsqueda en el entorno? Si tenían pistas, ¿por qué no rastrillaron con la correspondiente cantidad de perros y allanaron cuando Anahí estaba viva?”, sostuvieron en el comunicado.
Marcos Esteban Bazán, de 34 años, fue detenido luego de que los investigadores encontraran rastros de sangre, pelo y ropa de mujer —que están siendo periciados para determinar si pertenecían a la adolescente—en la casilla donde vive, ubicada a 300 metros del lugar donde fue hallado el cuerpo de Benítez, en la Reserva Natural Municipal Santa Catalina tras seis días de búsqueda.
Un grupo de amigos del sospechoso se manifestaron frente a los tribunales de Lomas de Zamora, donde aseguraron que es “inocente”, “una buena persona” y no conocía a la adolescente.
“Toda la ropa femenina que había en la casa era mía, cuanto mucho unas sandalias que son de la mamá de él. De Anahí ahí no hay nada, la única forma de que aparezcan cosas ahí es que se las hayan plantado”, denunció a la prensa una joven que se identificó como la pareja de Bazán.
Esta madrugada el juez de Garantías 4 de Lomas de Zamora, Sebastián Monelos, ordenó la liberación de Leonardo Agostino, el docente de 44 años, luego de ser indagado por el “homicidio agravado” de la adolescente por la fiscal de Violencia de Género de Lomas de Zamora, Verónica Pérez.
Según se informó, el profesor se declaró “inocente” y negó haber tenido una relación sentimental con Anahí, como surgió de los diarios íntimos de la víctima en poder de los investigadores.
“¿Por qué no la buscaron cuando estaba viva?”
Los docentes de la ENSAM denunciaron que la noticia del asesinato de Benítez estuvo acompañada por un “truculento tratamiento mediático” y responsabilizaron al Estado nacional, provincial y municipal por el “trágico final” del caso en una carta que enviaron a madres y padres de los compañeros de Benítez.
Las autoridades advirtieron que durante la investigación desde el Estado “revictimizaron a la víctima” y “mostraron a una Anahí depresiva, obsesiva” y a “un profesor abusador, perverso, sin escrúpulos y comprometido con el asesinato”.
Ahora la comunidad educativa comienza “el camino de reconstrucción afectiva y académica”, y aseguraron: “No vamos a renunciar al vínculo con nuestros estudiantes. No se construye una sociedad justa, con contenidos asépticos. Nosotros nos comprometemos a educar para la libertad”.
Leé el comunicado completo aquí:
_¿POR QUÉ NO LA BUSCARON CUANDO ESTABA VIVA?
El dolor por la pérdida de Anahí y su búsqueda durante seis días fue transformado por esta comunidad en amor, en movilización, en solidaridad.
La noticia de su asesinato, el truculento tratamiento mediático, seguida de confirmación y desconfirmaciones, hasta llegar al trágico final, nos obliga como comunidad a transformar el dolor en reclamo, en exigencia de justicia.
Exigimos Justicia y responsabilizamos al Estado Nacional, Provincial y Municipal, expresado en el Poder Político, Judicial y Policial.
Se dice que la justicia y la policía actuaron bien; si fuera así, Anahí hubiera sido rescatada con vida.
Nos preguntamos con dolor ¿Por qué se centró la búsqueda en el entorno? Si tenían pistas, ¿Por qué no rastrillaron, con la correspondiente cantidad de perros, allanaron cuando Anahí estaba viva? ¿Por qué citaron a sus amigos y compañeros, todos menores de edad, una y otra vez, de día, de noche, de madrugada?
Investigaron el entorno, revictimizaron a la víctima, nos mostraron una Anahí depresiva, obsesiva, un profesor abusador, perverso, sin escrúpulos, comprometido con el asesinato.
Si tenían pistas, por qué nos distrajeron, por qué no actuaron durante los cuatro días que Anahí estuvo viva, cuando todos las buscamos, cuando marchamos, cuando volanteamos, cuando nuestras voces se transformaron en un solo grito: ¡VIVA LA QUEREMOS!
Como comunidad educativa, hoy comenzamos el camino de reconstrucción afectiva y académica. No vamos a renunciar al vínculo con nuestros estudiantes. No se construye una sociedad justa, con contenidos ascépticos. Nosotros nos comprometemos a educar para la libertad.
Exigimos Justicia, no chivos expiatorios. Por Anahí, por las muchas Anahí. NI UNA MENOS.
PROFESORAS/ES DEL ENSAM
Banfield, 8 de agosto de 2017_
AUNO-8-8-17
SAM