Casi la mitad de los chicos de Lomas no desayuna o lo hace sólo a veces

Así lo revela un programa para conocer los hábitos nutricionales en diez escuelas de Lomas. Le seguirá un plan de acción con charlas y juegos. La idea es producir cambios alimenticios en los kioscos y bufetes de cada colegio.

Casi el 40 por ciento de los chicos en Lomas de Zamora desayuna sólo “a veces” por falta de tiempo, y el 35 por ciento también lo hace esporádicamente bajo la excusa de la inapetencia, según datos dados a conocer por una organización especializada en nutrición.

El proyecto “Nutrición en la Escuela” realizado en Lomas de Zamora reveló que el 77 por ciento de los chicos en edad escolar desayuna todos los días mientras que el 18 lo hace a veces; las causas de esta irregularidad son variadas, pero las más compartidas fueron la “falta de tiempo” y la “inapetencia”.

Las encuestas fueron realizadas durante mayo y junio a alumnos de quinto y sexto grado de las escuelas de distrito adheridas al proyecto con el propósito de obtener información de la población sobre hábitos alimenticios, conocimientos nutricionales, frecuencia de consumo, actividad física, compras y publicidad de alimentos.

El trabajo realizado en el distrito por el Cesni muestra que más del 90 por ciento de los chicos realiza una comida al día en familia, que por lo general es la cena.

Por otra parte, la actividad física no es un hábito cotidiano muy incorporado: menos del 20 por ciento la realiza a diario, mientras que la actividad de “mirar televisión” tuvo mayor éxito “con el 80 por ciento”, según datos obtenidos en la misma encuesta.

En diálogo con AUNO, la investigadora encargada del proyecto encarado por el Centro de Estudios de Salud y Nutrición Infantil (Cesni), Paula Pueyrredón, explicó que “el objetivo a largo plazo es modificar los hábitos de los pequeños y concientizarlos para que conozcan lo que hace bien y lo que es necesario incluir en las comidas”.

Si bien reconoció que una tarea de ese tipo “va a ser muy difícil”, manifestó que, en el marco del trabajo, “intentaremos producir cambios alimenticios en el kiosco y en el bufet de cada escuela”.

El mismo relevamiento precisó que los hábitos en el consumo de frutas y verduras son similares, ambos rondan el 50 por ciento en la ingesta diaria; y que poco más de la mitad de los encuestados afirmó leer la información del envase de un alimento a la hora de comprar.

Los chicos “tienen una confusión sobre los conocimientos de los alimentos causado por la publicidad”, señaló Pueyrredón y recordó un ejemplo: “En las encuestas algunos dijeron que el yogurt era bueno porque tenía vitamina C”.

La especialista precisó que fueron diez las escuelas seleccionadas para el trabajo y que su selección estuvo a cargo del Consejo Escolar lomense.

“La desnutrición aguda ha disminuido. Los casos de emanaciación (desnutrición grave) no sobrepasan el 1 o 1,5 por ciento de la población infantil de seis meses a cinco años”, según datos arrojados por la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud en 2006.

Al respecto, esa cifra pronostica que “la obesidad y su cortejo de enfermedades degenerativas será en le futuro la primera consideración de salud en el país”.

A partir de la información obtenida por las encuestas, CESNI realizó un plan de acción para cada escuela que consta de charlas y juegos con los que se trabajará de acuerdo a las edades de los chicos.

Es así como la entidad dejó a los docentes de cada institución el cuadernillo con actividades prácticas “Enseñar a Comer”, con pautas para que continúen trabajando en el tema hasta una nueva visita del equipo nutricionista.

“Las actividades que proponemos son dinámicas y tratamos que los chicos se diviertan aprendiendo”, afirmó la encargada del proyecto.

RCI-AFD
AUNO-09-08-07
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