Por tercera semana consecutiva, los vecinos de la localidad de Máximo Paz, partido de Cañuelas, se reunieron para hallar una solución al problema de contaminación ambiental que, según ellos, producen ocho industrias químicas radicadas en la zona, tal como lo publicara hace días esta agencia. Como consecuencia de esos reclamos, el Concejo Deliberante de Cañuelas exigió al director de Medio Ambiente de ese partido, Guillermo Radkiewicz, un informe detallado sobre cómo funcionan las empresas involucradas. Además, desde la Asociación de Empresas de la Zona Industrial de Máximo Paz se envió un comunicado a la asamblea vecinal para retomar el diálogo.
En el informe que exigió el Concejo, Radkiewicz deberá explicar cómo se habilitaron las empresas y en qué condiciones trabajan. “Es un amplio cuestionario que deberá exponer en 10 días” ante el Legislativo comunal, explicó a AUNO Alfredo Morgante, concejal del Partido Justicialista de Cañuelas.
Asimismo, en el marco de una asamblea, los vecinos criticaron la “ineptitud de Radkiewicz” por “no controlar la instalación de las industrias y, una vez la localidad contaminada, no hacerse cargo de la situación”. De manera que la medida tomada por el Concejo Deliberante trajo cierta tranquilidad a los vecinos, porque si el director de Medio Ambiente en los próximos 10 días no presentara el informe, podría ser sancionado con una falta agravada como funcionario público.
“No presentar el informe con los datos establecidos le originaria a Radkiewicz una interpelación, suspensión preventiva o directamente el Concejo le pediría la renuncia”, sentenció el concejal, a la vez que aclaró que “en el informe deberá constar cada industria radicada con su categorización, habilitación y un detalle sobre el resultado de las inspecciones realizadas en los afluentes e instalaciones”.
Por otro lado, en la reunión vecinal, la Asociación de Empresas de la Zona Industrial de Máximo Paz envió un comunicado en el que reconoció estar “al tanto de la problemática que afecta a la salud de los habitantes de la localidad”. Sin embargo, según el mismo texto, las empresas sólo estarían dispuestas a “solucionar los malos olores” que producen las emanaciones de las fábricas, de manera que quedaría pendiente una repuesta a las denuncias sobre contaminación de los acueductos.
El reclamo de los vecinos estaría fundamentado en las estadísticas que maneja el centro de salud de la localidad. Tal como lo publicara AUNO, estos informes indicaron que “los problemas respiratorios y en la piel de la población se han incrementado un 200 por ciento, a raíz de la apertura del sector industrial en Máximo Paz”, según denunció Mónica Baguer, referente de la agrupación de vecinos.
Por su parte, las empresas comunicaron que “están dispuestas a recibir a los vecinos o a concurrir a su asamblea para ayudar a resolver los problemas que tengan las fábricas”. En consecuencia, la industria “Adezin” se puso a disposición de los vecinos para tratar cualquier problema que se presente referido al funcionamiento de los asociados que integran el sector industrial.
Según lo trascendido, en las ocho fábricas del sector industrial acusadas por los vecinos de contaminar agua y aire, y provocar daños en la salud de la población, trabajarían 300 personas que podrían ser afectadas ante una eventual sanción contra las firmas. Pero de acuerdo con lo informado por Mónica Baguer, “nosotros sólo queremos una buena calidad de vida para nuestro hijos, no pedimos que cierren las industrias sino que no contaminen. Por eso haremos una nueva presentación en el Juzgado de La Plata y en la Fiscalía 1 de Lomas de Zamora”.
En el marco de la asamblea, los vecinos decidieron volver a reunirse esta semana en el Club Villa Maria, de Máximo Paz. Además, autoridades de Política Ambiental de La Plata se comprometieron a concurrir a esa reunión para colaborar en la resolución del conflicto.
AAF-AFD
AUNO-30-08-07
locales@auno.org.ar