Los 30 años de «Sr. Cobranza» se festejan en el sur. En diálogo con AUNO, el cantante de Las Manos de Filippi (LMF), Hernán “Cabra” Vega, recordó el origen del tema, su impacto político y social, la polémica con Bersuit y la vigencia que le dan las nuevas generaciones con versiones como la de Dillom.
El evento será este sábado desde las 20 en Cultura del Sur, Avenida Meeks 1066, Temperley, e incluirá la muestra fotográfica Rock Combativo Vol II con obras del fotoperiodista Pablo Grillo, quien sufrió el disparo de un cartucho de gas lacrimógeno de Gendarmería y continúa en recuperación.
De la Bersuit a Dillom: nuevas versiones de una misma canción
“A partir de que la hizo Dillom nosotros empezamos a festejar estos 30 años, a caer, a tomar un poco de conciencia del recorrido y de cómo toman los chicos de hoy la canción. Nos llena de orgullo”, expresó Hernán.
El conocido rapero hizo una versión en el Cosquín Rock 2024 en la que modificó la frase “Norma Plá a Cavallo lo tiene que matar” por “A Caputo en la plaza lo tienen que matar”, en referencia al ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo. Esa no fue la única oportunidad en la que un joven artista entonó la canción que fue y es himno de denuncia y protestas.
Desde la popular versión de Bersuit Vergarabat a la de la cantante Connie Isla en el ciclo FIESTA ¡FA!, conducido por Mex Urtizberea, al próximo lanzamiento que los agrupa: el líder de Las Manos de Filippi anunció que a finales de agosto compartirán una nueva versión todos juntos.
“Norma Plá a Cavallo lo tiene que matar”
Vega se refirió al cruce que tuvo en marzo con el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, quien había publicado en su cuenta de X una defensa del decreto 150/25, sobre la administración y gestión de derechos de autor de SADAIC. En el post citó una línea de “Sr. Cobranza” para defender a los autores, pero se equivocó y la atribuyó a la Bersuit, banda que hizo conocida la canción pero no la compuso.
“No es obligatorio saber que ese tema no es de ellos pero fue una prueba más de que hablan de cualquier cosa, que no tienen ni idea de nada y lo hacen en otros temas importantes” dijo Vega.
Fiel a su espíritu combativo y frontal, «Cabra» le respondió en su momento a Sturzenegger: “Fede, la letra esa que citás la hicimos nosotros y está dedicada a gente como vos, saludos”. El funcionario mileísta había escrito en X: «Pelear contra la libertad de los artistas es una hipocresía, ¿quizás oculta la necesidad de proteger una caja? Recordemos, ya que estamos en el rubro canciones, a Bersuit Vergarabat: ‘No me digan, se mantienen con la plata de los pobres. Eso solo sirve para mantener a algunos pocos. Transan, venden».
La historia de «Sr. Cobranza», un himno de protesta
La canción nació cuando la banda hacía espectáculos callejeros y buscaba atraer al público con un tema polémico para iniciar sus funciones. Cabra recordó haber leído una editorial de Prensa Obrera, de Jorge Altamira, en la que “había un par de conceptos que tenía medio flojos” y después de eso tuvo la visión política de escribir todo lo que pasaba.
Para él, el contexto era muy similar al de ahora con respecto a “la lucha que llevaban en ese momento Norma Plá y los jubilados”. También, apuntó que el gobierno tenía cierto apoyo, “no era que todo el mundo ya hablaba del menemismo como algo terrible o malo” sino que la canción iba a contramano de lo que se escuchaba en la calle.
Carlos Menem atravesaba su primera presidencia y junto a Domingo Cavallo, su ministro de Economía, impulsó políticas de privatización y apertura económica. Mientras seducía a la población con la “convertibilidad” y el consumo aumentaban el desempleo y la exclusión social.
La popularidad de “Sr. Cobranza” llegó en el 98’ luego de que la Bersuit la grabara con Santaolalla y Universal, lo que le dio proyección internacional. Fue entonces cuando estalló la “guerra, sobre todo contra el Pelado Cordera”, pero con el tiempo los músicos de Las Manos se dieron cuenta de que “gracias a Bersuit el tema recorrió al mundo”.
Bersuit la incluyó en su exitoso disco Libertinaje. Para legalizar su uso, Universal firmó un contrato con LMF por los derechos de sus canciones, a cambio de editarles un disco que luego no promocionó, lo que generó una gran sensación de estafa y oportunismo y el enojo de LMF, que expresó su malestar públicamente y en el arte de sus álbumes posteriores. Con el tiempo, sin embargo, las diferencias se limaron y ambas bandas llegaron a compartir escenario, dejando atrás el conflicto.
Hasta la popularidad de este tema, Las Manos de Filippi tocaba en Cemento y en El Dragón, lugares under. Actualmente vienen de una gira nacional y en septiembre comienzan un tour por los 30 años de la banda en Europa.
AUNO-23-08-2025
CP-MDY
