Un desplante del ahora marginado Rodrigo Archubi allanó el camino para que Eduardo Ledesma comience a ganarse un lugar como titular en Lanús.
El paraguayo llegó en silencio al primer equipo cuando le tocó ingresar en el mediocampo en reemplazo de algún compañero lesionado o suspendido, aunque su reciente confirmación en el conjunto ‘granate’ por decisión técnica sí generó ruido en club.
Archubi se negó a ir al banco de suplentes y abandonó la concentración del plantel cuando se enteró que Ramón Cabrero no pensaba incluirlo en la formación inicial para el encuentro con Argentinos Juniors.
El entrenador le aplicó una dura sanción y lo marginó del grupo, amparándose en unas pautas de convivencia acordadas previamente con los jugadores durante una charla en el verano pasado.
“El caso de Archubi es una decisión muy personal de él. Yo no soy quién para decir si estuvo bien o mal, pero se tomó un tiempo para tomarla. Tuvo tiempo para pensarlo”, expresó Ledesma, en declaraciones a la Agencia Universitaria de Noticias y Opinión.
“Es una lástima, porque Archubi es un jugador importante para este equipo. Cualquiera sea su futuro, le deseo la mejor de las suertes. Y en el caso de que vuelva a jugar con nosotros, lo mismo, es decir, le voy a desear lo mejor, porque es un gran compañero”, agregó.
Al “Flaco” Archubi la insolencia le costó el puesto y dejó abierta la posibilidad de que otros valores del club, como Ledesma, puedan mostrarse en el equipo.
Pese al sismo que generó la decisión de Cabrero de prescindir por el momento de los servicios del campeón mundial Sub 20 en Holanda 2005 y una de las jóvenes promesas de la entidad, Ledesma descartó que existan problemas dentro del plantel.
También le restó importancia a los ademanes y muestras de fastidio que algunos integrantes del equipo exhiben dentro de la cancha cuando Lanús no encuentra el rumbo.
“En el plantel no hay ningún tipo de problemas. Si a veces se ve durante el transcurso del partido que alguno de los chicos hace algún tipo de gesto pasa simplemente por una circunstancia propia del juego. Acá nadie se cree más que nadie”, remarcó.
Ledesma dijo estar listo para aprovechar la oportunidad de jugar que le brinda Cabrero y descartó que el entrenador aplique un rigor de ‘mano dura’ en el seno del plantel, después de que el atacante Santiago Biglieri sufriera un castigo similar al de Archubi en el certamen pasado y recién ahora vuelva a ser tenido en cuenta.
“Cabrero no es un técnico duro ni nada por el estilo. Al contrario, es un hombre tranquilo, que habla muy poco y siempre trata de tomarse todo con
calma. Habla únicamente antes de los partidos, durante la charla técnica, pero nunca marea ni confunde a los jugadores”, comentó.
“En caso de que exista un problema, espera que todo se normalice y luego intenta hablar y aconsejar al jugador”, concluyó Ledesma.
Lanús tiene 12 puntos en el Torneo Clausura 2007 de fútbol, luego de cuatro victorias e igual cantidad de derrotas, y el próximo fin de semana recibirá a Arsenal de Sarandí, por la novena fecha, en busca de lograr un triunfo que refuerce sus posibilidades de ingresar a alguna competencia internacional al término de la temporada.
AUNO 04-04-07 EFR