Viajan a Francia deportistas transplantados

(AUNO-TERCER SECTOR*) Veintidós deportistas argentinos a los que se le realizó un transplante de órganos viajarán a Francia para competir en los XIII Juegos Mundiales para Transplantados. En los últimos cuatro mundiales, compitieron unos 120 atletas y desde Inglaterra ‘94 la performance de los argentinos ubicó al país en el cuarto puesto del medallero internacional.
Durante estos meses, poco se habló del trabajo que está haciendo la Asociación de Deportistas Transplantados de Argentina (ADETRA), la entidad que promueve la donación de órganos y agrupa a 300 deportistas “de excelencia” que fueron intervenidos con algún transplante.
El tenis es el deporte en el que se encuentra el representante argentino más destacado de los últimos tres torneos, Ariel Baragiola, quien fue campeón en los mundiales de Sydney, Budapest y Japón luego de que su madre le diera “vida por segunda vez” al donarle un riñón para el transplante renal que necesitaba.
“Destacados somos todos los que vamos”, asegura el tenista a AUNO-Tercer Sector luego de sus entrenamientos en las instalaciones del CENARD. Con tres galardones dorados en singles y dobles, el deportista cuenta que su trabajo y el de sus compañeros “debe ser un aliciente tanto para los transplantados que creen que tienen grandes imposibilidades como para el resto de las personas que, por desconfianza, se niegan a donar órganos”.
Pese al esfuerzo particular, para Baragiola “las limitaciones de los deportistas pasan por otro lado”. Si bien hay grandes probabilidades de que la Secretaría de Turismo y Deporte de la Nación financie los pasajes y la estadía, por ahora 14 son los deportistas que viajarán con dinero de sus arcas personales.
Sólo cinco personas viajarán con gastos cubiertos: a cuatro los patrocina un laboratorio y al restante ~~–Baragiola—~~, una cadena de supermercados, en la cual trabaja.
Entre los 22 participantes con mayores logros están los corredores Elvira Álvarez y Juan Pablo Juárez, ambos con transplantes de médula ósea, que desarrollan sus especialidades en maratones de hasta 10 kilómetros.
También la mendocina Roxana Mateo espera repetir sus logros en lanzamiento de jabalina, tenis y natación. Este abanico de disciplinas se debe a que, a diferencia de los habituales torneos internacionales, un mismo deportista puede participar hasta en 5 áreas diferentes.
La cuarta posición que ganó Argentina en el medallero se debe a la relación que se establece mediante el promedio entre la cantidad de deportistas que participan y el número de galardones. En el caso argentino, en los últimos dos mundiales viajaron 40 deportistas que trajeron 41 medallas.
Para los juegos que se desarrollarán desde el 19 al 27 de julio, las buenas expectativas están puestas ~~entre otras disciplinas~~ en tenis, atletismo, tenis de mesa, ciclismo, golf y volley, el único deporte que se practica en equipo dentro de los juegos.
“A lo que tiende ADETRA es a la concientización de dos aspectos vitales: la donación de órganos y la importancia como persona del mismo transplantado”, explicó Carlos Masip, el vocero de la institución. Además, destacó que “el deporte ayuda a que el enfermo no se autodestruya creyendo que no puede hacer ningún esfuerzo. Algunos de los deportistas tomas 20 pastillas por día, y está a la vista todo lo que pueden hacer”.
La primera vez que el país participó en juegos para transplantados fue en 1994, en Inglaterra, con cuatro atletas. A partir de allí, nació la experiencia de los Juegos Argentinos que, en adelante, sirvieron como método de clasificación para los internacionales.
A la hora de reconocer los logros de deportistas argentinos “de primera”, se deja en un costado a los considerados “deportistas de tercera”, señaló Masip. Sin embargo, éstos son los que, con esfuerzos deportivos y financieros particulares obtienen reconocimientos tan relevantes como los que ocupan las primeras planas de los medios de comunicación.