Cuando apenas restan menos de diez días para que el Mundial haga vibrar a Sudáfrica y la repercusión se sienta en todo el planeta, la Selección que dirige Diego Maradona, ya se encuentra concentrada en Pretoria, con la ilusión de ganar la Copa después de 24 años.
A medida que se acerca el inicio de la competencia, los datos estadísticos comienzan a circular y sugieren el análisis de distintos aspectos que tiene que ver con la participación argentina en los mundiales.
Esta nota se propone repasar la participación de aquellos jugadores que, surgidos en clubes del Sur del GBA, lucieron la camiseta albiceleste en la máxima instancia competitiva del fútbol internacional.
Entre los 23 jugadores convocados por el DT está el defensor Clemente Rodríguez, que con un gran presente en Estudiantes de La Plata, será el único lateral natural que tendrá el plantel de Maradona para afrontar la competencia.
Surgido en las inferiores de Los Andes, el ex Boca representará en este Mundial a las canteras de la Zona Sur del Conurbano bonaerense, que varias veces le dieron a la Selección nacional una importante cantidad de futbolistas de renombre.
El mayor exponente del Sur en la Selección es otro lateral: Javier Zanetti, el jugador que más veces jugó con la casaca argentina en la historia (136 partidos), y que supo representar al país en los mundiales de Francia ’98 –donde anotó un gol frente a Inglaterra, en los octavos de final- y en Corea-Japón ’02.
El “Pupi” se inició en Talleres de Remedios de Escalada en 1992, en la Primera B Metropolitana, y un año después pasó a Banfield, club donde militó durante tres temporadas.
A partir de allí, brilló en el Inter de Italia y se convirtió en el máximo referente de un equipo que, actualmente, es múltiple campeón en su país, con cuatro títulos consecutivos, y que el sábado 22 mayo ganó la Champions League de Europa, luego de vencer (2-0) al Bayern Munich de Alemania, en Madrid.
Sin un lugar en la nómina que formó Maradona, Zanetti será, por su experiencia y posición en la cancha, una de las ausencias de mayor preponderancia en Sudáfrica.
Banfield y Lanús tuvieron sus campeones
Aunque el “Pupi” sea el hombre con más presencias en la Selección, no tuvo la oportunidad de levantar la Copa del Mundo, como sí lo lograron, en circunstancias distintas, Ricardo La Volpe, en Argentina en ’78, y Héctor Enrique en México ’86.
Surgido como arquero en las inferiores de Banfield, La Volpe —que por entonces jugaba en San Lorenzo—, integró el plantel dirigido por César Luis Menotti, pero no jugó, pues era tercero en las preferencias del entrenador, por detrás de Ubaldo Fillol y Héctor “Chocolate” Balley.
En cambio, el mediocampista, que empezó su carrera en Lanús, se ganó la titularidad en la Selección que, bajo la orientación de Carlos Salvador Bilardo, obtuvo la segunda Copa del Mundo para Argentina, en tierras aztecas.
Los dos campeones también tomaron caminos diferentes en su carrera como entrenadores, ya que La Volpe dirigió a México en Alemania ’06, donde quedó eliminado en octavos de final, justamente, frente a la Selección que dirigía José Néstor Pekerman, en un intenso encuentro que finalizó 2-1 para Argentina.
Enrique integra el actual cuerpo técnico argentino, y tratará en Sudáfrica, de repetir los momentos que él vivió como futbolista hace 24 años, en la última consagración mundialista de un equipo argentino.
Finalistas en el 30’ y 90’
Quien estuvo a punto de levantar el trofeo fue José Tiburcio Serrizuela, que en 1990, cuando estaba en las filas de River, integró el plantel que llegó a la final frente a Alemania en el Olímpico de Roma, en aquella recordada derrota por 1-0. El “Tiburón” se formó en las divisiones inferiores de Los Andes.
Para encontrar jugadores surgidos en equipos del Sur del GBA, que hayan tenido la posibilidad de jugar una final, hay que remontarse a Uruguay ’30, un torneo en el que Argentina terminó como subcampeón, detrás del elenco anfitrión.
El arquero de ese combinado era Ángel Bossio, que defendía en aquel momento el arco de Talleres de Remedios de Escalada, y que supo representar al país en los Juegos Olímpicos de Ámsterdam, Holanda, en 1928.
Otros dos jugadores oriundos de la zona Sur, que disputaron el Mundial de Uruguay fueron el defensor Edmundo Piaggio y el delantero Carlos Spadaro, que se iniciaron en Lanús.
En Suecia, Chile e Inglaterra, el Sur también dijo presente
Sin embargo no es la única vez que dos jugadores del “Granate” tomaron parte en la cita ecuménica del fútbol mundial, pues en Suecia ’58, tanto el atacante Alfredo Rojas, como el defensor José Ramos Delgado, integraron el plantel argentino que protagonizó una de las decepciones más grandes en la historia del fútbol criollo, al caer en la primera ronda por 6-1 ante Checoslovaquia.
Ambos futbolistas protagonizaron otras experiencias mundialistas.
Delgado (ya en River) estuvo en la pobre campaña que Argentina realizó en Chile, donde una Selección que entrenada por Juan Carlos Lorenzo no pudo superar la fase de grupos. En tanto que Rojas, integró el plantel en Inglaterra ’66, cuando era jugador de Boca.
Pero el defensor quedó en el recuerdo de los hinchas del elenco del Sur del Conurbano bonaerense, al ser parte del primer plantel de la institución que terminó subcampeón en 1956, los afamados “Globetrotters”.
También en el Mundial de Inglaterra, Rolando Irusta, de Lanús, viajó como suplente de Antonio Roma, consagrado atajador de Boca.
En ese torneo, estuvieron también el delantero Mario Chaldú y el volante Oscar Calics, ambos jugadores de San Lorenzo, que nacieron en las inferiores de Banfield, e incluso Nelson López, el defensor que jugaba en el “Taladro”.
Idéntica situación que vivió Eliseo Mouriño, ocho años antes, de la mano de Boca pero que inició su carrera en Banfield, con quien consiguió el segundo lugar del campeonato de 1951, en una final perdida frente a Racing.
Del semillero para el mundo
A fines del siglo XX, la cantera del Sur siguió haciendo aportes. En Estados Unidos ’94, Leonardo Rodríguez integró el equipo que disputó aquel Mundial, recordado por doping positivo de Maradona y la eliminación en octavos de final a manos de Rumania, que se impuso por 3-2.
Pero el mediocampista que vistió la celeste y blanca y logró, de la mano de Alfio Basile, la Copa América en Chile ’91 y Ecuador ’93, inició su carrera en Lanús, pasó por San Lorenzo, el fútbol europeo y la Universidad de Chile, para concluir su ciclo como profesional en el “Granate”
Otro club de la zona Sur que aportó jugadores desde su semillero fue Temperley, pues Julio Cruz, que por entonces actuaba en el Inter de Italia, dijo presente en Alemania ’06
El “Jardinero” hizo las inferiores en el “Gasolero”, pero la quiebra del club a principios de los años noventa, determinó su pase a Banfield.
En la institución albiverde, Cruz debutó en Primera División, en 1994, y luego de unos años en River, viajó a Europa para coronarse campeón en varios clubes del viejo continente.
Dos que venían del amateurismo
Dos casos particulares restan por analizar, y ambos fueron en 1934 en el mundial que Italia ganó ante su público, pues para Argentina, el arquero era Ángel Gripa, que estaba en las filas de Sportivo Alsina, una institución que desapareció del mapa futbolístico en los primeros años del profesionalismo.
La otra curiosidad es la del delantero Francisco Rúa, que empezó en el fútbol en Talleres, donde jugó apenas cuatro partidos y un año después disputó un solo encuentro con la camiseta de Lanús, para recalar en Sportivo Dock Sud, institución en la que militaba cuando participó en esa competencia internacional.
El que renunció
Un hecho emblemático es el de Jorge Carrascosa, marcador de punta derecho que debutó en la Primera de Banfield en 1967 y formó parte del Huracán campeón de 1973, que brilló bajo la conducción técnica de Menotti.
En Alemania 74’, Carrascosa fue parte de los seleccionados, pero desistió de jugar en el ’78. Y aunque los motivos de aquella renuncia nunca se aclararon, se rumoreó que el defensor no quería ser partícipe de una Copa del Mundo organizada por la dictadura militar.
Así, la capitanía quedó en manos de Daniel Alberto Passarella, que levantó la primera Copa del Mundo que obtuvo Argentina en aquellos días dominados por el terrorismo de Estado y la represión.
La misma Copa que buscará alzar el equipo que viajó hoy a Pretoria, con las ilusiones intactas en las maletas, y con Clemente Rodríguez como embajador del Sur.
AUNO-31-05-10
MRQ-LDC