Los Bomberos Voluntarios de Lomas de Zamora cumplieron 100 años este fin de semana y lo celebraron con un acto en el cuartel central, al que asistió el intendente municipal, Martín Insaurralde, concejales, representantes de entidades de la zona, una delegación de los Bomberos Voluntarios de la Boca y de cuerpos de voluntarios de distritos bonaerenses.
Durante la ceremonia, que se llevó a cabo el sábado último, el intendente destacó “la importante tarea que tienen los bomberos para un distrito como Lomas con más de un millón de habitantes” y manifestó que el cuerpo de voluntarios “tiene las puertas abiertas del municipio en cualquier día y hora para lo que necesiten”.
Néstor Vicente, jefe del cuerpo de Bomberos Voluntarios, expresó que “es un orgullo poder festejar un acontecimiento tan importante como éste porque somos el sexto Cuartel de Bomberos del país y eso nos llena de orgullo, ya que pudimos sobrevivir a momentos muy complicados como en el año mil novecientos noventa y ocho, cuando la cosa se nos complicó mucho”.
“Le quiero agradecer al intendente por darnos todo su apoyo porque en intendencias anteriores no comprendían que nosotros trabajamos por el bien común, pero desde que él era secretario de Gobierno siempre comprendió nuestras necesidades”, agregó el titular del cuerpo.
Luego de los discursos se descubrió una placa con los nombres de todos los integrantes del Cuerpo de Bomberos, cadetes, activos o de reserva y por último se descubrió una unidad de tracción a sangre, recién restaurada, que utilizaban los bomberos cuando recién comenzó a funcionar el cuartel. Allí estaba la primer bomba, donada por James Ritchie, quien fue el primer jefe del cuerpo. El acto principal por el centenario será el 10 de abril, en el centro de Lomas.
Al finalizar el acto, el subcomandante Ricardo Mauro, segundo jefe del Cuerpo, informó a AUNO que “en este momento estamos en plena etapa de remodelación del cuartel central, un trabajo que se hace a pulmón”.
“Otra cosa que estamos haciendo es la selección y clasificación del material para nuestro futuro museo, en el que habrá elementos que se usaron desde un comienzo para hacer nuestro trabajo hasta los que usan hoy”, agregó Mauro.
Por su parte, el jefe del Cuerpo, comandante general Daniel Vicente, expresó a AUNO que “pese a que hace 41 años que estoy en el cuerpo, todavía no se por qué soy Bombero. Sé que la vocación me dice que debo estar en esto”.
Acerca de cómo avanzan las obras para la inauguración del futuro Museo de la Institución el jefe del cuerpo sostuvo que “para poder terminarlo este año necesitamos un poco de ayuda del clima y que se nos acerquen los vecinos para colaborar con lo que puedan porque cuando esté abierto la entrada va a ser gratuita”.
Luego, Vladimiro Supro, el bombero con más antigüedad, señaló a AUNO: “Siempre me gustó ayudar a la gente y cuando en mi barrio, San José, hicieron el destacamento me ofrecí como voluntario y acá estoy, hace treinta años aunque en este momento estoy en la reserva”.
Sobre su primer experiencia como bombero, Spuro recordó que “fue en el barrio San José, donde en ese momento había muchas casillas de madera y muchas veces de noche se producían hasta cuatro o cinco incendios”. Spuro dijo que “aunque pasen los años uno tiene este trabajo en el corazón porque en esto nunca hay diferencias de dónde hay que trabajar.”
En los cien años de historia de los Bomberos Voluntarios de Lomas de Zamora solo dos integrantes del cuerpo fallecieron durante un acto de aervicio, el bombero Ariño en el año 1913 y cabo primero Hugo Orlando Castillo, en 1975.
La historia del cuartel
El 1910, Lomas de Zamora tenía un año como ciudad, tenía apenas treinta manzanas y cerca de 30 mil habitantes. Uno de los problemas que se presentaban en esta pujante ciudad eran los incendios, ya que la mayoría de las casas eran de madera
En enero del año 1902 se había producido un gran incendio en un edificio de Santa Catalina donde un joven perdió la vida. En octubre de 1906 otro incendio en Hipólito Irigoyen y Loria destruyó el Almacén de Ferrari Hnos, aunque esta vez no hubo víctimas.
Los vecinos decían que “algo había que hacer”. El entonces comisario de la seccional de la Policía local, Modesto Benavídez, escuchó a los vecinos y los invitó a una reunión, en la sede de la Sociedad Italiana. Se debatió el problema y se constituyó una Comisión Directiva provisoria, para crear un Cuerpo Antifuego, que le toco presidir a Benavídez quien, al poco tiempo, fue trasladado a otro destino. Esta situación le puso un paréntesis a la iniciativa de crear el Cuerpo de Bomberos.
El otro gran tema era el juntar fondos y comprar la bomba. Al mismo tiempo, en Banfield hubo inquietud sobre el mismo tema, que era liderada por los hermanos Ritchie, quienes eran importadores de materiales para combatir incendios. Aquellos vecinos se unieron y se organizaron.
Diego Ritchie reunió a varios vecinos en el Café Tivoli, de Banfield. Entre ellos estaban Ricardo Green, el contraalmirante Zumbían Roseta y Juan Morgana, quienes decidieron realizar una colecta para formar el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Lomas de Zamora.
Como resultado de esta colecta se formó el Cuerpo de Bomberos, que tuvo su primer sede en lo que hoy es la Cochería Leguizamón, en Boedo y Rodríguez., hoy Avenida Hipólito Irigoyen.
El primer presidente de la asociación fue el capitán de navío Gustavo Sundblandt Roseti y su primer jefe fue Diego Ricthie, quien donó la primera extinguidora con un tanque de 500 litros, que era trasladada apulso a cada incendio. Más tarde se compró la segunda, que también se trasladaba a mano, pero tenía dos tanques de 500 litros cada uno.
La institucion se iba consolidando y se trasladó a Boedo 453, luego a Laprida 640 y a Laprida y Saavedra, hasta que en 1926, con la compra del terreno de Saavedra 46, se construyó el cuartel central. En mil novecientos treinta y seis, luego de la compra del terreno vecino, se habilitó la Sala de Primeros Auxilios.
La primera demostración se realizó en la Plaza Grigera de Lomas para la que se utilizaron cajones de madera vacíos. Resultó todo un éxito. Pero la primer acción real que realizaron los 30 integrantes del cuerpo fue socorrer a los afectados por las inundaciones ocurridas en el distrito en 1911, cuando debieron trabajar las 24 horas durante varios días.
La segunda acción de importancia fue en 1920, durante un incendio en un café en el cual debieron ingresar por los techos para poder salvar la vida de varias personas.
En los cien años de historia de los Bomberos Voluntarios de Lomas de Zamora solo dos integrantes del Cuerpo fallecieron durante un Acto de Servicio, el bombero Ariño en el año 1913 y cabo primero Hugo Orlando Castillo en 1975.
Ahora, además del Cuartel Central de Saavedra 46, los Bomberos tienen delegaciones en Banfield, San José, Lavallol, y en Cuartel IX.
La actual Comisión Directiva es presidida por Vicente Gabriele, y el Cuerpo de Voluntarios está conducido por el comandante general Daniel Vicente. El Cuerpo Activo integrado con 135 hombres distribuidos entre el Cuartel Central y los destacamentos. Además, integran la institución el Cuerpo de Reserva, compuesta por aquellos que han superado los 25 años de servicio y la Escuela de Cadetes, que da formación a los chicos entre 10 y 18 años.
El parque móvil asciende a 35 unidades, equipadas con tecnología de punta, como cisternas, escaleras mecánicas, equipos de salvamento, y botes.
AUNO 01-02-10 MS EV
