A una semana de la victoria en las elecciones, el presidente electo de Los Andes, Victor Grosi, habló frente a socios e hinchas en el microestadio de básquetbol del club para compartir los lineamientos de su mandato que se extenderá entre 2019 y 2021.
“No hay ningún tipo de trampolín en esta dirigencia. Yo vengo a hacer un trabajo, pero no lo voy a hacer solo. Necesito de la colaboración y la discusión de todos. No hay problema con las discusiones; lo que importan son las conclusiones”, señaló el nuevo mandatario.
En esa misma línea, Grosi resaltó la importancia del diálogo con los socios en el día a día y dejó en claro que su prioridad será cumplir con su cargo en Los Andes.
“No hay un presidente caprichoso acá. Si me equivoco y viene una idea mejor, la tomamos. Si quieren hablar con el presidente, vienen y hablamos porque voy a estar muchas horas acá. Es un paréntesis de dos años en mi vida, en los que algunas responsabilidades que tengo no las voy a valorar totalmente. El eje va a ser sacar a Los Andes de la situación en la que está y transformarlo en un club pacífico y en evolución”, indicó.
En relación al ámbito deportivo de Lomas, el presidente se refirió a la disciplina más sensible para el hincha: “Estamos trabajando hace una semana en lo futbolístico. No somos magos, pero sabemos cuál es la presión del futbol. Voy a sostener muy fuertemente desde lo institucional al cuerpo técnico y a los jugadores”.
Grosi también se tomó un tiempo para agradecer al entrenador Juan Carlos Kopriva, que permanecerá en el club pese a la pérdida de la categoría y el correspondiente ajuste presupuestario.
“Valoro mucho la actitud, el profesionalismo y, sobre todo, el compromiso de quedarse en esta instancia. Hoy es obligación nuestra generar las condiciones de que, cuando el equipo entre a la cancha, la onda sea positiva. Para construir esa energía, tenemos que saber exactamente qué queremos”, afirmó.
Otro de los puntos que remarcó el mandatario electo fue el de la violencia, una problemática con la que debió convivir con regularidad el simpatizante del ‘Milrayitas’ en los últimos años.
“El primer partido que juguemos, voy a venir con mis hijos y mis nietos porque, a partir de ahora, el fortalecimiento institucional es lo que va a dar por terminada una etapa. Estoy seguro que los socios que nos votaron y los que no nos votaron quieren un club amigable, pacificado y tranquilo. En la calle hay mucha violencia, y cuando uno entra al club tiene que pensar en que entra a su casa. Hay que llevar adelante una contracultura, porque hay muchos pibes que están en la tribuna que no tienen opciones, y Los Andes le tiene que dar esas opciones”, resaltó Grosi.