José Sand fue el goleador histórico de las divisiones inferiores de River y llegó a Primera División en el Torneo Apertura 1998 (0-0 contra Vélez). Sin embargo, más allá de sus pergaminos en la cantera del club de Núñez, no pudo afirmarse entre los titulares.
Así, sin chances de mostrarse, en la temporada 1999-2000 fue cedido por primera vez en su carrera: el destino fue Colón de Santa Fe, donde tampoco fue capaz de mostrar sus credenciales de artillero serial. Después tuvo un paso fugaz por Independiente Rivadavia de Mendoza (00-01) y por el Vitoria de Brasil (2001). Pero la suerte tampoco lo acompañó.
Sin fortuna en Núñez, ‘Pepe’ caminó unas pocas cuadras y llegó a Defensores de Belgrano. Allí, en Primera B Nacional, el arco se le abrió y su nombre volvió a sonar fuerte por los pasillos del ‘Monumental’.
Su gran año el ‘Dragón’ le permitió volver al club que lo vio nacer, ya que Leonardo Astrada, entonces entrenador del ‘Millonario’, lo pidió y le dio una oportunidad. El correntino formó dupla con Fernando Cavenaghi y se dio el gusto de ser campeón con la banda roja cruzada en el pecho.
No obstante, cuando parecía que se afincaría en River, el club lo volvió a prestar y armó las valijas para mudarse en Banfield. En el ‘Taladro’, luego de un arranque poco feliz, tuvo una gran temporada, ya que fue el máximo anotador del equipo.
Banfield no hizo uso de la opción para comprarlo y Sand, otra vez sin espacio en Núñez, regresó a Colón, en donde volvió a cumplir con su cuota goleadora. Tan bien le fue que Daniel Passarella, al frente del plantel de River, parecía decidido a contar con él.
Pero entonces apareció Lanús, con una valija con 1,4 millones de dólares y la propuesta de titularidad asegurada. Y Sand, cansado de ser moneda de cambio, aceptó el desafío de mudarse… El resto es historia conocida.
AUNO
03-12-2007 MM-MFV
