El odio esta vez tuvo como destinatario el mural por los Derechos Humanos que preparaban en el club Talleres de Escalada. Los pañuelos de las Madres que aparecen en el bosquejo de la pintada aparecieron tachados por cruces. El ataque es similar al que sufrió hace poco tiempo un mural con la misma temática que hicieron socias y socios de Banfield en una pared del estadio Florencio Sola.
Esta primera versión del mural de Talleres está en la esquina de Lituania y Gaboto. Pero las socias y socias que participan en el proyecto están conversando con la comisión directiva para hacerlo en un lugar más visible, más cerca de la entrada a la cancha.
En el club de Escalada, la actividad de DD.HH. tiene un apoyo institucional firme: el sábado de la semana pasada el club entregó carnets de socios honorarios a vecinas y vecinos de la localidad desaparecidos durante la última dictadura cívico militar. Lo mismo que hace unas semanas hizo el colectivo de Derechos Humanos del club Banfield, una actividad que fue declarada de interés municipal en Lomas de Zamora.
El ataque al mural de Talleres, que iba a ser terminado este 25 de Mayo, fue repudiado por los bloques de concejales de Lanús, organizaciones sociales y socias y socios comprometidos de otros clubes.
“Ahora estamos buscando el mejor lugar para hacerlo. Queremos que esté en una pared exterior para que sea bien visible en el barrio. Y para que el Estado se haga cargo de su protección. Quienes hicieron esto quizá piensan que es un juego y no entienden que el 80 por ciento de la población reivindica estos valores”, dijo a AUNO Ulises Roldán, hijo de desaparecidos y militante de DD.HH.
El mural en Banfield
El colectivo de Derechos Humanos del club Banfield hizo punta con los murales alusivos en la zona. Apenas los inauguraron, fue atacado por un grupos que reivindican el Terrorisno de Estado. Modificaron la cifra de 30.000 detenidos desaparecidos por la de 6.000, que publicitan los sectores negacionistas.
El mural en Los Andes
El club de Lomas también tiene su mural por Memoria, Verdad y Justicia, en una de las paredes exteriores del estadio Eduardo Gallardón. Lo pintaron socias y socios que forman parte del colectivo Los Andes tiene Memoria, en una jornada en la que tuvieron el apoyo y la compañía de vecinos y varias organizaciones.