Lomas de Zamora, agosto 24 (AUNO).- El director técnico de Banfield, Hernán Crespo, asumió los errores que cometió su equipo en el inicio del torneo, remarcó la importancia de enfrentar “a un rival de prestigio” como Boca por la cuarta fecha de la Superliga y trató de llevar calma a los hinchas del `Taladro’ para que “no se vuelvan locos” con los promedios porque “aún quedan 31 fechas por jugar”.
Crespo analizó primero la caída 3 a 2 frente a Argentinos Juniors en la jornada anterior, en la que se vio una mala imagen de su equipo. Allí, sus dirigidos tuvieron la posesión de la pelota pero carecieron de ideas y cometieron graves errores defensivos que lo llevaron a la derrota.
“Nosotros tenemos que mejorar en el juego. Lo comenté ya: con Argentinos Juniors no jugamos como deberíamos. De hecho, teniendo la posibilidad de hacerlo, no lo hicimos. Entramos en un ritmo que no nos conviene, no nos gusta y no jugamos bien. Argentinos nos permitía ir y no hicimos lo que trabajamos”, consideró.
El DT está convencido que jugar con el sistema de 3 centrales en defensa es el adecuado y, ante la consulta sobre la falta de ensayos durante la pretemporada, respondió que la decisión obedeció a cómo se dieron los movimientos del mercado de pases.
“Jugamos así porque el ‘Chino’ Vittor llegó dos semanas antes de empezar el campeonato y Junior Arias llegó tres días antes de jugar contra Estudiantes. En base a lo que tenés, jugás… y ahí probás. Eso es parte del reglamento que nos impone este mercado”, remarcó.
La cercanía del `Taladro’ con la zona baja de los promedios es algo que el propio entrenador trata de desdramatizar. Por eso, intenta bajar la tensión al explicar que la temporada recién empieza y que todo se definirá en mayo del próximo año.
“En esto hay doce equipos. Descienden tres. Si vas atrás de esto, te volvés loco. Todos queremos tener esa estabilidad y poder sumar pero es muy difícil cuando estamos en un lugar donde cualquiera le puede ganar a cualquiera. Jugamos tres fechas y quedan aún 31 más. Así que queda muchísimo”, explicó.
Y agregó: “Estamos todos en la misma. Algunos empataron, otros se llevaron un poco más. Estamos a nueve puntos. El fútbol argentino es un sube y baja. Nosotros vamos a ser un equipo jodido para todos. Con nosotros va a ser difícil y eso es lo que estamos buscando y consolidando”.
Para el ex delantero de la Selección Argentina el encuentro del domingo ante Boca genera “un estímulo distinto” en los jugadores, en los hinchas y también en la prensa.
“No es un partido más. Boca es un rival de prestigio. Nos lo marca ya el hecho de tanta presencia de ustedes acá. La caja de resonancia no es la misma. Jugar contra Boca genera mucho para los periodistas, para los familiares y amigos de los jugadores. No es lo mismo”, reconoció.
Por último, se tomó un momento para destacar la importancia de la llegada del italiano Daniele De Rossi al conjunto azul y oro y cuánto bien le hará al futbol argentino. Además, espera que esta decisión del volante campeón del mundo sea imitada en un futuro por más jugadores europeos.
“Me encantó lo de De Rossi. El argentino añora ir allá pero cuando vas te das cuenta también que hay una gran curiosidad de parte de ellos de venir pero nadie se animaba. Lo económico no ayudaba pero que venga Daniele y que lo disfrute está buenísimo. Ojalá lo tratemos bien para que esto se haga contagioso y se haga un efecto dominó para que cuando se vuelva allá, se lo cuente a muchos para que vengan más Daniele De Rossi”, sentenció.
AUNO 24-08-19
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