(AUNO-Tercer Sector*) La ley de mutuales vigentes es, como tantas otras, una ley de la época de la dictadura. A pesar de haber recibido dos reformas durante este último periodo constitucional, conserva su marca de origen. Un proyecto de ley de mutuales presentado en la Cámara de Diputados actualiza el funcionamiento de las asociaciones mutuales y está a la espera de que sea aprobado una vez que el Congreso de la Nación sesione regularmente.
Las mutuales se rigen por la ley 20.321, sancionada antes del fin de la dictadura de Lanusse, en abril de 1973. Durante los dos últimos años recibió modificaciones (ley 23.556 y ley 25.374) que no alcanzaron a borrar su sesgo antidemocrático. El diputado Héctor Polino, promotor del proyecto aseguró a AUNO-Tercer Sector, que la ley vigente constituye un impedimento para el normal funcionamiento de estas asociaciones sin fines de lucro. “Es una ley de los años `70 que requiere de actualización para que se pueda cumplir con la principal finalidad de las mutuales, que es la prestación de servicios”, explicó.
Intervensionista, autoritaria, defectuosa, compleja. Esos son algunos calificativos que recorren los fundamentos que sostienen la necesidad de sancionar una nueva ley de mutuales. Es que en la actualidad, luego de más de tres décadas de la sanción de la ley originaria, el Estado posee las facultades de intervenir una mutual en caso de que lo crea necesario y de sancionarlas sin sumario previo y sin la posibilidad de ser oídas ante la probable infracción que le imputan. Esta ingerencia tan común durante las dictaduras militares que azotaron al país, todavía encuentra lugar en la actual legislación. “No es posible que una autoridad administrativa intervenga una mutual, esa es una facultad excesiva, que sí tiene la Justicia”, criticó Polino. Por eso, el proyecto prevé que las sanciones a las mutuales sólo pueden ser aplicadas con la conformación de un sumario por parte de la autoridad de aplicación que estaría a cargo del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social.
A pesar de que las asociaciones mutuales y las cooperativas persigan fines distintos (las mutuales presta servicios y las cooperativas tienen una finalidad económica), el diputado socialista encontró la manera de que ambas tengan algo en común. El objetivo primordial es modernizar la ley vigente, hecho que motivó que se tome como modelo la ley de cooperativas que rige actualmente.
El proyecto resalta la naturaleza de las mutuales como entidades sin fines de lucro y su fin principal de prestar servicios a todos sus socios, como la asistencia médica, farmacéutica, de sepelio, otorgamiento de subsidios, préstamos, seguros, promoción educativa, cultural, deportiva y turística.
La iniciativa pretende corregir errores de la legislación vigente, como es la denominación de socios a quienes no lo son. El ejemplo más evidente es el de los socios adherentes, que no tienen ni voz ni voto para intervenir en la elección y participación de los órganos sociales de estas entidades. De esta manera, al no poder participar de la labor institucional de la mutual a la que adhieren, se convierten en simples receptores de servicios. En cambio, con la nueva ley se intenta dar mayor participación y derecho tanto a los socios activos como adherentes, con el objetivo de comprometerlos a la entidad que se incorporan.
El proyecto fue presentado en Diputados y se encuentra en una de las comisiones de trabajo. “La Cámara está semiparalizada hace tres meses, así que esperamos que para principios del año que viene sea aprobado por las dos cámaras”, expresó Polino.
Agencia Universitaria de Noticias y Opinión
*Revista Tercer Sector
Presentan un proyecto de ley de mutuales
Un proyecto de ley que regula la actividad de las asociaciones mutuales fue presentado en la Cámara de Diputados. La iniciativa pretende reemplazar la ley vigente que fue sancionada durante la dictadura de Lanusse en 1973.
Por Romina A. González