La comuna propone controles junto a municipios vecinos para evitar accidentes en Hipólito Yrigoyen

La encargada de temas viales de Lomas reclamó controles sobre la avenida Hipólito Yrigoyen, en el marco de unas jornadas sobre la problemática. Aseguró a AUNO que para disminuir los accidentes de tránsito se necesita “un cambio profundo” en la sociedad. El año pasado hubo poco más de 11 mil muertos en todo el país a raíz de esa causa.

La directora de la Escuela de Seguridad Vial de Lomas de Zamora, Rosana Barone, aseguró que para reducir los accidentes de tránsito “no es suficiente la capacitación docente, sino que es necesario un cambio social” y advirtió que son la principal causa de muerte de las personas de entre 5 y a 35 años.

La funcionaria, en un reportaje concedido a AUNO, destacó que en la sociedad existe “una cultura del riesgo por sobre la cultura preventiva, que tenemos que tener para bajar los accidentes” y se expresó a favor de que los municipios del conurbano bonaerense realicen “controles conjuntos” en la Avenida Hipólito Yrigoyen, donde se producen “hechos graves”.

Enfatizó, en el marco de unas jornadas que sobre la problemática se realizan en la Municipalidad lomense, que “tiene que haber un cambio mucho mas profundo, no sólo desde la educación” y advirtió que las “conductas viales son culturales, porque los hábitos están muy arraigados por determinadas publicidades que hacen apología de la velocidad y del riesgo”.

A continuación el reportaje:

-¿Cómo surgió la idea de capacitar a los docente en seguridad vial?
-Es importante trabajar con el docente en este tema, no sólo sobre accidentes de tránsito, sino de hábitos saludables en la vía pública, que deben instalarse en los chicos desde edades tempranas. Muchas veces los docentes lo limitan a una charla breve de señales de tránsito. La idea es capacitarlos, porque tienen poca formación en el tema, para que después los transmitan a sus alumnos, utilizando estrategias para los padres también. La idea es trabajar dando pautas y estrategias.

-¿Qué es lo que observan como repercusión en los chicos?
-En realidad no tenemos un seguimiento de los chicos, lo que sabemos es que no basta solamente con esta capacitación para que se reduzca el índice alto de mortalidad por accidentes de tránsito. Esto es a largo plazo. Se necesita todo un cambio en la sociedad, porque nosotros estamos educando chicos, pero estos, a su vez, en la vía pública se desenvuelven con sus padres, que muchas veces hacen lo contrario a lo que se les enseña a los chicos. Esto es un aprendizaje social mucho más fuerte que lo que se da adentro del aula. Se necesitan más capacitaciones docentes, mayores o mejores controles de tránsito, más requisitos para conseguir la licencia, para que los conductores estuvieran educados, y un cambio social también desde espacios publicitarios. Lo que podemos ver con estas capacitaciones son pequeños cambios de conducta, que es mucho. Que los alumnos que son los destinatarios lleven su mensaje a los adultos y por lo menos darle un marco un poco más seguro a un grupo de chicos.

-¿Cómo es la recepción del tema entre los maestros?
-En general están muy acostumbrados a que las charlas de educación vial sean directivas sobre lo que se debe o no se debe hacer o enseñar las señales de tránsito. Cuando vienen se encuentran con información mucho más profunda sobre las características evolutivas de los chicos, por qué son más vulnerables, y sobre contenidos pedagógicos. Estas capacitaciones están planificadas por docentes, no por técnicos de tránsito. Lo que se llevan de las capacitaciones son estrategias para poder bajarlo, porque lo que le pasa a muchos docentes es que dicen ‘me interesa el tema, pero no se qué enseñar’.

-¿Cómo evalúa la problemática en la sociedad?
-En la sociedad tiene que haber un cambio mucho mas profundo, no sólo desde la educación. Lleva tiempo, porque las conductas viales son culturales, los hábitos están muy arraigados por determinadas publicidades que hacen apología de la velocidad y del riesgo. Todo esto va formando a la sociedad, entonces de ahí que es difícil observar que toda la población use el cinturón, que todos los motociclistas usen casco. Hay una cultura del riesgo por sobre la cultura preventiva que tenemos que tener para bajar los accidentes

-¿Cuáles son las cifras que manejan sobre accidentes de tránsito?
-En 2007, se registraron alrededor de 11.200 muertos, según datos del ISEV (Instituto de Seguridad y Educación Vial), y es con el que estamos trabajando en estas capacitaciones. De estas muertes, 1.200 son menores. Los hechos de tránsito son la primera causa de muerte de personas de entre 5 a 35 años, que es la franja de mayor riesgo. Y en la población en general, es la tercera causa de muerte, después de enfermedades cardiovasculares. Estas son cifras muy altas.

-¿Qué es lo que observan en los resultados de las actividades?
-Son satisfactorios en cuanto a la predisposición del docente en cuanto a informarse y trabajar. Los resultados en la sociedad son otra cosa.

-¿Cómo se encuentra este distrito con respecto a los demás?
-En realidad, no hay mucha diferencia entre ellos, podemos hablar de características comunes del conurbano bonaerense, no de la diferencia de distritos. Las áreas de diferencia quizás serían inspección de transito y controles. La Escuela de Educación Vial corresponde a Cultura y se enfoca sólo en lo que damos. Lo que es bueno es que haya una medida general a todos y que en el conurbano se apliquen mas controles en las fechas y horarios que mayor cantidad de accidentes se producen (viernes y sábados a la noche). Deberían hacer controles conjuntos en todos los distritos, porque hay muchos hechos graves a lo largo de la avenida Hipólito Yrigoyen.

-¿Qué medidas piensan realizar luego de que finalicen las jornadas de capacitación?
-Nosotros vamos a seguir trabajando con capacitaciones docentes. Para el año que viene está programada la reinauguración del circuito vial, que está en estado de abandono en estos momentos, donde funcionan las oficinas y la escuela,
para que todos los días se puedan realizar actividades por lo menos recreativas con el tema. Después planeamos programar jornadas para adolescentes y veremos cuál es el apoyo que recibiremos de las autoridades.

AUNO 23-10-08
GD-HRC

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