En el marco del inicio del paro de 72 horas dispuesto por los profesionales de la salud, un centenar de médicos, enfermeros y pacientes del Hospital Alende, de Lomas de Zamora, se movilizaron desde ese centro sanitario hasta la Municipalidad local para reclamar una mejora en el sistema de salud que depende de la comuna.
La medida de fuerza contextualizada en el paro de los 77 hospitales bonaerenses fue organizada por la Asociación de Profesionales de la Salud lomense (APSLZ), integrante del gremio provincial de ese sector CICOP, que denunció “la grave situación” del sistema sanitario lomense, incluido los “bajos” salarios de los trabajadores.
El cese de actividades en el distrito afectará la normal atención –-no las urgencias— en el Hospital Alende, de Ingeniero Budge, y las unidades sanitarias, particularmente las que funcionan con un “escaso” presupuesto en los barrios más pobres.
Los trabajadores, entre otras cosas, reclamaron que el intendente Jorge Rossi que cubra las vacantes de médicos y enfermeros en ese centro sanitario.
De hecho, según datos de APSLZ, la guardia del hospital demanda una docena de profesionales por día, que son parte de los 82 cargos que existen en esa área.
Sin embargo, siempre según el gremio, actualmente existen doce vacantes, es decir la cantidad necesaria para que ese espacio de atención funcione durante un día.
Esos puestos de trabajo se tratan de “cargos críticos que hacen que, por ejemplo, la guardia de pediatría de los lunes se haya encontrado totalmente descubierta durante los últimos meses”, sostuvo la APSLZ a través de un comunicado.
Pero la demanda de profesionales no es solamente en esa área, sino también en las salas de internación pediátrica, abierta el año pasado “sin que se nombrara nuevo personal”.
Por este motivo hay días que los niños internados corren el riesgo de quedar sin un médico a cargo. Es más, los reclamos afirman que en los consultorios externos trabajan cuatro de las nueve pediatras necesarias para satisfacer la atención a los pacientes.
Por otra parte, la asociación denunció “presiones” de parte del director de ese centro sanitario, Rubén Díaz Maison, hacia los médicos para que no adhieran a medidas de fuerza y hagan que “las estadísticas (que dan cuenta de la atención médica) se inflen a como dé lugar”.
Otra de las cuestiones que también demandaron los trabajadores tiene que ver con el funcionamiento de las ambulancias que dependen de la comuna y que “no cuentan con el equipamiento necesario ni siguiera para traslados”. Inclusive, afirmó el gremio”, varias circulan “sin seguro” y tienen las “cubiertas lisas, no tienen freno de mano, balizas, sirena ni luces de stop”.
En lo que se refiere a las herramientas para la atención sanitaria, estos móviles “carecen de elementos básicos: laringoscopios, tubos endotraqueales, cardiodesfibrilador, aspirador, sistema codo-bolsa, inmovilizadores laterales, la medicación es insuficiente y muchas veces no hay ni guantes”.
“Todo el personal del sistema de emergencias está en condición de contratado o planta temporaria, teniendo varios de los empleados cuatro años de antigüedad”, concluyó la denuncia.
AFD
