Un reencuentro, medio siglo después

Un grupo de ex estudiantes de la Escuela 15 de Banfield festejará los 50 años de su egreso. Desde entonces, no habían vuelto a verse todos juntos. El encuentro es producto de la dedicación de cuatro de ellos, que iniciaron una búsqueda “desesperada” del resto. Están a punto de reencontrarse. Las organizadoras, cuentan la historia.

“¡Bordón!”, cuenta Hilda que le gritaron sus ex compañeros de la escuela primaria cuando ingresó a un bar para recordar con ellos viejos tiempos. Su primera reacción fue la sorpresa: no podía creer que recordaran su rostro. Claro, habían pasado unos cuantos años desde que los vio por última vez. Luego de recorrer “toda una vida” de cincuenta años, a un grupo de egresados de la Escuela 15 “Dardo Rocha” de Banfield se le cruzó por la cabeza reencontrarse; volver a ser niños por un rato, revivir travesuras y anécdotas, contarse quiénes son ahora.

Algunos se habían vuelto a ver en 2001, en el centenario de la institución a la que concurrieron de chicos, y a partir de ese momento iniciaron una ardua búsqueda del resto de sus compañeros de clase. Apelaron a cuanto recurso se les ocurrió: internet, cadenas de correo electrónico, y hasta solicitaron en la escuela el listado de alumnos de aquella época para no basarse únicamente en la fragilidad de la memoria. Hoy, a cincuenta años de su egreso, quieren festejar, y lo harán el próximo sábado 22 de noviembre con un acto en la escuela.

Gracias a la búsqueda que con ahínco realizaron Ana María Andrés, Lidia Rovito, Blanca Carreño y Juan Carlos Munner, asistirán entre diez y doce ex estudiantes. La celebración, que comenzará a las diez, incluirá la colocación de una placa.

En diálogo con AUNO, Lidia reconoció que “es muy difícil” que se junten todos, puesto que “algunos viven en lugares lejanos y no se sabe si podrán asistir”. El objetivo del festejo por los 50 años de egresados es, para ella, “reestablecer los vínculos que se deshacen en un contexto atravesado por el individualismo”.

Algunos de ellos se reúnen todos los meses en el bar Juancito, de Banfield. “La primera vez que me los encontré –-en mayo— tenía tanto miedo de no conocerlos que fui con una foto”, recuerda Hilda entre carcajadas. Luego se emociona y resalta que las reuniones, a las que asiste con sus hijas, son “una verdadera fiesta”.

“Nos contamos nuestra vida porque ya pasamos todo”, cuenta Blanca sobre los temas de conversación que aparecen en los encuentros. Y advierte que ingresa en un estado de regresión: “Al pasar los años le das importancia a etapas de la vida como la infancia”, señala.

Cuando se juntan, dice, se hacen presentes las anécdotas que cada uno olvida con el paso del tiempo. Blanca rememora, por ejemplo, que en aquél entonces pocos tenían televisor y que varios llegaban al colegio corriendo para que quienes los tenían, les contaran los programas al resto.

Juan Carlos Munner reconoce no tener memoria. Pero rastrea por su cabeza y se acuerda de “la única pelea” de su vida, a los 12 años: “Le pegué una trompada a otro chico en el baño de hombres y sus anteojos se cayeron al piso”, relata cómicamente. De ese altercado, cuyo motivo no recuerda, parecen no quedar rastros, ya que los contrincantes se vieron casi 50 años más tarde y pudieron conversar sin problemas.

Un recuerdo compartido son los mapas que dibujaban con tinta china y a los que dedicaban horas y mucho empeño. Stella Maris Molinari recuerda que era un “trabajo muy minuicioso” y que “no alcanzaba el día para cumplir con los deberes”.

Al trazar un paralelismo en torno a la educación ayer y hoy, Lidia sostiene que “lo que se perdió en autoritarismo también se perdió en exigencia”, y agrega que “había maestras muy malas”. Hilda comparte esa visión: “Algunas nos tiraban de los pelos y de las orejas a los alumnos”.

Cincuenta años después de aquellos mapas, de esas exigentes maestras, de charlas y trifulcas infantiles, ellos lucharon por reencontrarse. Y repetirse, una y otra vez, que el tiempo pasó y que las cosas no cambiaron tanto. Y repetirse, casi sin reparos: “¡Tenés la misma cara!”.

DY-AFD
AUNO-19-11-08
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