Servicios de remises del sur del Gran Buenos Aires suben de precio cuando se restringe el uso del Gas Natural Comprimido (GNC) durante los picos de frío, según denunciaron vecinos.
El viernes, la Secretaria de Energía de la Nación ordenó a las distribuidoras Gas Natural BAN, Metrogas y Camuzzi suspender la provisión de gas a sus clientes de Capital y Provincia de Buenos Aires, con el objetivo de asegurar el suministro a las casas.
Como consecuencia de esta medida, las agencias de remís que cuentan con una cantidad de autos que en su mayoría utilizan GNC, registraron dificultades tanto económicas como organizativas.
Uno de los encargados del turno noche de Remís Center, ubicada en Monte Grande, sostuvo a este medio que “desde el viernes se trabajó con menos de la mitad de la flota, eso sería 7 de los 18 autos de la agencia”, y agregó que, aún así, se mantuvo el precio del viaje en el mínimo de 4 pesos.
Situación similar atravesó la remisería Premium, de la misma ciudad, que no varió sus precios a pesar de funcionar con el 40 por ciento menos de la flota, ya que “los autos que no pueden andar a nafta o consumen demasiado no pudieron trabajar”.
Especialmente las remiserías que no modificaron sus precios, registraron una considerable baja en la recaudación que se extendió hasta el domingo, cuando los surtidores volvieron a cargar GNC a sus clientes, y aquellos que sí cambiaron sus precios, como una agencia de Llavallol, no percibieron mayores ganancias, sino que trataron de no ir a pérdida.
En contraste, algunas estaciones de servicio de las zonas de Llavallol, Lomas de Zamora, Luís Guillón y Monte Grande, obtuvieron mayores ganancias debido al aumento de las cargas de gasoil y nafta.
“Facturamos más porque a algunos remiseros no les quedó otra que cargar nafta, y eso se notó” sostuvo uno de los empleados de la YPF de Boulevard Buenos Aires y Jujuy, localidad de Luís Guillón, quien agregó que, no obstante, “hubo menos clientes”.
El viernes circuló el temor de que hubiera también faltantes de nafta durante el fin de semana, sin embargo no se registraron casos al respecto, al menos en la zona Sur del Gran Buenos Aires.
Esta medida del Gobierno que apunta a mantener el suministro a casas de familia y comercios, se aplicó por segunda vez este otoño, y en ambos casos, fue llevada adelante sin aviso previo.
Las consecuencias económicas para quienes tienen que llenar el tanque del auto (sobre todo los que lo utilizan para trabajar) están evidenciadas en los precios, ya que hacerlo con GNC cuesta entre 10 y 15 pesos, con gasoil 75 y con nafta 95 pesos aproximadamente.
En la zona que corresponde a Metrogas, los cortes de gas afectaron a muchos de los grandes usuarios y a 350 estaciones de GNC, mientras que en el caso de Gas BAN, los que sufrieron la falta de gas fueron 1.200 industrias y 340 expendedores de GNC.
Remises suben de precio cuando no hay gas
Vecinos del Gran Buenos Aires denunciaron que cuando se produce falta de gas, como el pasado fin de semana, los remiseron suben sus precios porque tienen que usar nafta como combustible.