Ante los preocupantes cuadros de bronquiolitis registrados y reconocidos por las autoridades sanitarias de la Provincia, asociaciones gremiales y trabajadores de la Salud publicaron una carta en la que le exigen al gobierno bonaerense decalarar la emergencia sanitaria.
Frente a la situación crítica que observan en cuanto a la preveención y atención de la enfermedad, la Central de Trabajadores Argentinos (CTA)de la Provincia; la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la provincia de Buenos Aires(CICOP), junto al Foro por los Derechos de la Niñez y la Juventud bonaerense consideraron urgente la necesidad de la emergencia sanitaria ante “el aumento en número y gravedad”.
Mediante la publicación de un documento en el diario El Día de La Plata, el frente gremial puntualizó los pasos que deberían seguir las autoridades provinciales para resolver la crisis.
“Designar una partida presupuestaria descentralizada en los territorios de riesgo, para contratación de recursos humanos y la inversión en infraestructura, instalar postas respiratorias estratégicamente instaladas y funcionando las 24 horas y contar con una red de emergencia efectiva resolviendo en tiempo y forma los casos graves en los propios territorios”.
En el documento se considera que “el brote de bronquiolitis está en su punto más alto, y el mismo ministro de Salud de la Provincia, Claudio Mate, ha hecho pública esta consideración.
El incremento de casos registrados en general y de los casos graves en particular es una relaidad anticipada por todos los análisis epidemiológicos que eran de estado público, pero la respuesta pública específica ha sido hasta ahora insuficiente e ineficiente a la luz d ellos casos fatales registrados”.
Daniel Godoy, miembro del Instituto de Estudios y Formación (IEF)de la CTA provincia, advirtió: “Nos esperan 60 días de un invierno que todavía no terminó de apretar, y de un germen que todavía no terminó de infectar”.
Godoy relacionó la situación de pobreza con la mayor cantidad de niños afectados al afirmar que se trata de una enfermedad que tiene “una buena recuperación si es tratada en condiciones adecuadas” .
El dirigente sindical criticó al Gobierno por la manera de atender la situación, que en la mayoría de los casos lleva al niño afectado a la muerte.
“La respuesta es insuficiente, porque los insumos se reparten tarde y mal, las redes de emergencia para las derivaciones funcionan de manera burocratizada y en destiempo, faltan salas de atención, insumos e infraestructura adecuada, en un contexto en el que el personal se encuentra desbordado y en emregencia permanenete”, señaló el dirigente.
Frente a los reclamos, voceros del ministerio de Salud provincial aclararon que “por ahora la emergencia no será declarada, aunque estamos en alerta”.
Por su parte, la pediatra Flavia Raineri, coordinadora del Programa Materno Infantil del Ministerio de Salud bonaerense, hizo referencia a la posibilidad de declarar la emergencia sanitaria. La profesional realizó una alerta, como paso previo a declarar la emergencia, que implica entre otras medidas, reforzar y tener presencia en los lugares más críticos y aumentar el número de camas disponibles.
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