La muerte del genocida Jorge Rafael Videla

Fue símbolo de la dictadura militar iniciada en marzo de 1976. Falleció solo y sin el acompañamiento de aquellos sectores oligárquicos que lo habían puesto en la Rosada. Desde la dictadura se inició un proceso de regresión en todos lo frentes e intentaron devolver el país a la etapa anterior al peronismo.

María Miranda

Lomas de Zamora, mayo 17 (AUNO) – El genocida Jorge Rafael Videla murió hoy mientras se encontraba preso en el penal de Marcos Paz por los crímenes de lesa humanidad, que cometió al frente de la dictadura, que usurpó el gobierno argentino entre 1976 y 1983.

En marzo de 2005, el entonces presidente Néstor Kirchner ordenó con firmeza a quien era el jefe del Ejército, Roberto Bendini: “Proceda”. Era para que descolgara el cuadro de Videla (y también del otro dictadorzuelo Bignone) del Colegio Militar, en el Palomar.

Videla había recibido varias condenas a cadena perpetua en los juicios que se sustanciaron en tribunales del país y fue quien encabezó la junta procesista desde el 24 de marzo junto al marino Emilio Eduardo Massera y el aeronáutico Orlando Ramón Agosti.

“El pronunciamiento militar, no fue una sorpresa para la mayoría de los argentinos”; “hoy las instituciones están avasalladas por este régimen kirchnerista encabezado por la presidenta Cristina” y “padecíamos vacío de poder, parálisis institucional y riesgo de una anarquía, y frente a este estado el ciudadano pidiendo la intervención de las Fuerzas Armadas”, había dicho el genocida en una entrevista concedida a la revista española Cambio 16.

Las últimas palabras dichas de Videla en el ámbito público fueron el 16 de marzo de este año en una entrevista realizada por el periodista español Ricardo Angoso de la revista Cambio 16.

Videla habló sobre el proceso encabezado por él y la junta militar, sobre la actualidad argentina y sobre el juicio a la junta militar, donde afirmó que “La gente nos demandaba que interviniéramos e incluso Balbín llegó a decir en esos momentos que tenía las manos vacías de soluciones, que la clase política no podía hacer más”.

“Si nosotros no lo hacíamos, el vacío de poder iba a ser aprovechado por la subversión o tomábamos el poder o la subversión se hacía por la vía de las armas con las instituciones. Teníamos planes, métodos para el combate al terrorismo, podíamos hacerles frente y así lo hicimos”, señaló el genocida a esa revista monárquica.

También en esa entrevista se refirió a las víctimas de la dictadura al desmentir la cifras: “Hay una gran disparidad en las cifras que se ofrecen, lo cual le resta credibilidad a lo que se presenta o se intenta hacernos creer. No se puede pasar de un extremo a otro, de 32.000 que presentan algunos a 7.000 cifrado por otras comisiones”.

Por otro lado, Videla se refirió a la actualidad argentina y criticó el actual gobierno al decir que ““La ‘vendetta’ de Kirchner contra el ejército seguirá mientras persista el Unicato”” y describió la situación de las instituciones de la república como “avasalladas por este régimen kirchnerista encabezado por la presidenta Cristina y sus secuaces, que, medrando con la sangre de los otrora mal llamados jóvenes idealistas, continúan hundiendo a la patria en el abismo anacrónico del marxismo”

También llamó al ‘levantamiento armado’: “También quiero recordarles a mis camaradas, principalmente a los más jóvenes, que hoy promedian las edades de 58 a 68 años, que aún están en aptitud física de combatir, que en caso de continuar sosteniéndose este injusto encarcelamiento y denostación de los valores básicos ameriten el deber de armarse nuevamente en defensa de las instituciones básicas de la República”, aunque el pedido fue ignorada por los miembros de las FF.AA.

AUNO 17-05-13
MM-HCR

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