Con el impulso del Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos y el Instituto contra la Discriminación, el Racismo y la Xenofobia (Inadi) fue lanzado el ente que regulará la actividad de los patovicas en todo el país. El objetivo principal del nuevo organismo será prevenir y erradicar los actos de violencia y discriminación de los trabajadores del rubro de control y admisión de locales de esparcimiento público.
El Registro de Empresa y Trabajadores de Admisión y Permanencia (Rencap) tendrá entre sus principales funciones registrar y entregar carnets a todos los trabajadores y empresas que ofrecen servicio de control en admisión y permanencia en eventos públicos. Además, abrirá mediante una web y una línea telefónica 0800 la posibilidad de radicar denuncias en casos de violencia y discriminación efectuada por los trabajadores de este sector. Por último, creará un observatorio que realizará informes periódicos sobre la temática.
El flamante director del Rencap, Juan Tegiacchi, explicó que este nuevo dispositivo tendrá “dos objetivos: eliminar la discriminación de quien quiera acceder a un evento y que los desatinos se resuelvan con acciones preventivas y disuasivas”.
Por su parte, Oscar Castellucci, padre de Martín, el chico asesinado en 2006 por un patovica del boliche La Casona, de Lanús, alertó a los jóvenes que llenaban el auditorio donde se hizo el anuncio: “Esto no es una cuestión de los adultos, esto es para que los jóvenes tengan las posibilidades que Martín no tuvo”.
En otra línea, Castellucci, que también fue promotor de la ley 26.370 que dio paso a la creación del Rencap, manifestó que “cuando no hay leyes pierde el más débil”. Pero remarcó que “esta ley es sólo un instrumento” y que ahora “hay que seguir avanzando”.
Uno de los temas centrales en que se adscribe este registro para patovicas es el de luchar contra la discriminación, y puntualmente sobre esto habló el presidente del Inadi, Claudio Morgado: “Siempre pareció natural la presencia de los ‘patovicas’ y se naturalizó la violencia que ejercían”. En busca de desnaturalizar esta situación, Morgado reivindicó la creación del registro y la consideró “una construcción política y cultural”.
Esta mirada fue compartida por el secretario del Sindicato Unificado de Trabajadores Controladores de Admisión y Permanencia de la República Argentina (Sutcapra), Leandro Nasarre, para quien “antes el mejor trabajador era el más grandote y el que más pegaba”, pero ahora “la finalidad nuestra es cuidar a las personas y para eso nos vamos a tener que capacitar”.
“Los trabajadores no éramos considerados como tales, sino que sólo nos veían como ‘patovicas’, y cuando íbamos a alguna reunión o conferencia, los jóvenes nos insultaban”, recordó.
Para poder llegar a la creación del Rencap fue importante el trabajo mancomunado entre el gremio y la Asociación Civil Martín Castellucci y el Estado.
Según el director del Rencap, la instrucción que de la que habló Nasarre ya se está dando en la provincia de Buenos Aires “tiene que ver con una formación que plantee más que nada no coaccionar al individuo sino protegerlo”.
De hecho, las capacitaciones ya se están desarrollando en los partidos de La Plata y en Ramos Mejía, con reconocimiento del Ministerio de Educación de la Nación.
El ministro Julio Alak homenajeó a Oscar Castellucci como otro argentino, que “al igual que las Abuelas y Madres de Plaza de Mayo, transformó el dolor en esperanza, para que lo que le sucedió a su hijo no pase más”, y de hecho, “la intención del registro es que no sucedan más casos de violencia y discriminación”.
LR-AFD
AUNO-09-10
