El mismo lugar, las mismas ganas, la misma pasión. Gente de antes, de ahora, generaciones que se juntan. Un mismo motivo: AUNO cumplió veinte años. Con una ceremonia que tuvo lugar en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Lomas de Zamora (UNLZ), más de cincuenta periodistas formados en esta agencia de noticias celebraron el cumpleaños de ese espacio de formación que desde hace dos décadas se convirtió en una usina de profesionales que trabajan en medios de comunicación de todo el país y el exterior.
Con un sueño grande y un grupo chico, la entonces AUN (sin opinión ni internet) se abrió camino en agosto de 1990. “Al principio tipiábamos en viejas máquinas de escribir y la única forma de hacer copias era con carbónico (entre hoja y hoja). Después hubo una segunda etapa con esténcil, era absolutamente obsoleta. Ver la agencia como está ahora era impensable en aquel momento”, comentó Ariel Bargach, uno de los alumnos fundadores y redactor de la agencia de noticias Telam.
“Cuando nosotros empezamos era totalmente distinto. Teníamos máquinas de escribir y debíamos turnarnos para hacer las notas”, recordó el periodista Gustavo Berón.
Muchos fueron los que se acercaron el último viernes 27 a celebrar el aniversario de la agencia. La cita fue a las 19. Un mail en cadena invitó al lugar de sus raíces: la Facultad de Ciencias Sociales de la UNLZ.
Los saludos del reencuentro recorrían el lugar y se hacían eternos. La redacción fue visitada por quienes lo poblaron en las viejas épocas: María Julia Oliván, de Canal 7; Mariana Carbajal, Eduardo Videla y Andrés Osojnik, de Página/12; María Julia Mastromarino, de Telefe; y Diego Schurman, de radio Del Plata, por unas horas dejaron de ser los licenciados y periodistas de la actualidad, para volver a ser esos muchachos y muchachas motores de la agencia.
Las anécdotas de cuando recién se iniciaban en el periodismo revoloteaban de aquí para allá. Background y más background: el partido de ping-pong, las corridas en bicicletas, los choripanes a la salida, las desgrabaciones y los tipeos a máquina.
“AUNO no es cualquier agencia, es un lugar que quiero mucho donde empecé a sentirme periodista”, definía Maria Julia Mastromarino. Y esa frase se repitió en muchas otras bocas. Es que la agencia es el lugar donde muchos de los alumnos de periodismo de la UNLZ tienen su primera experiencia en medios de comunicación.
Redactando más de dos décadas de noticias de los partidos de Lanús, Almirante Brown, Esteban Echeverría y Lomas de Zamora, y superando las crisis que sacudieron al país, AUNO sigue siendo un espacio de formación que mantiene el compromiso de seguir con la misma calidad de trabajo.
Una vez en el auditorio, siguieron los recuerdos a partir de un video que mezclaba extractos de la vieja AUN y la actual AUNO. Las imágenes se sucedían con coros de risas y comentarios: “¡Qué flaco que estabas!” “¡Mírenlo, tenía pelo largo!”.
“Íbamos en bicicleta o caminando a repartir el servicio, con el Fiat 133 de (Daniel) Casal, las pocas veces que no se quedaba en el camino, o con el Renault 4 de Paula Trapani”, compartió durante su discurso Daniel Miguez, director de AUNO.
Luego de las palabras de Ailín Bullentini, que habló en representación de las camadas de periodistas más jóvenes; de Martín Voogd, de La Razón, que lo hizo en nombre de “la generación intermedia”; y de Mariana Carbajal, de Página/12, que fue la voz de los alumnos fundadores, se entregaron menciones a varios de los profesionales que dieron sus primeros pasos en la agencia.
Antes del cierre del acto oficial, el decano de la Facultad de Sociales, Santiago Aragón, consideró que es “motivo de orgullo permanente que la agencia forme parte de la facultad” y resaltó que AUNO “es un espacio de formación personal, donde (aún) está la dignidad de la agencia: el trabajo de ser mejor”.
Con el paso del tiempo, “los nuevos chicos se hicieron dueños de la agencia. Así que, además de se un lugar para aprender, es un lugar donde podés ser vos mismo”, reconoció Martín Voogd, periodista de La Razón y también editor de la sección Deportes, de AUNO.
Durante el brindis no faltó el cantito de “Feliz cumpleaños”, entre las computadoras y ejemplares de la revista “El Cruce”, que la Facultad edita desde 2009.
Aquel viernes en que, tal como definió Miguez, se estuvo “celebrando la audacia de un grupo de muchachos que soñó en grande”, se convirtió en un día en donde el pasado, el presente y el futuro de AUNO fueron la noticia.
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